Pasan los días y se mantiene la incertidumbre por el proyecto que habilite, en forma optativa, a que en las elecciones provinciales del 27 de octubre puedan votar los jóvenes comprendidos entre 16 y 18 años. En las nacionales, que se realizarán el mismo día, sí podrán hacerlo, con lo cual se llega a la increíble hipótesis de que haya doble padrón y, por ende, una gran confusión. Ya lo dijimos tiempo atrás: ¿Cómo se hará para controlar que un elector de esa edad vote únicamente las listas nacionales y se abstenga de hacerlo con las provinciales que se exhiben dentro del cuarto oscuro? ¿Cómo se soluciona este problema si el voto es secreto? A la cuestión la deben definir los legisladores, pero como existen intereses cruzados, está trabada. En el Senado, los radicales han frenado el proyecto de Jorge Moreno (FPV-PJ) y en Diputados el oficialismo hizo lo propio con una iniciativa de Víctor Luna (FCS), quien, aparte del voto de los jóvenes, pretende que se instauren en la provincia las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO). Curiosísima posición del radicalismo: lo que quiere imponer para todos los partidos políticos, que a tres meses de una elección es una utopía, lo niega para lo que es posible hacer con sus propios afiliados.

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Sobre las PASO hay varias especulaciones. El Congreso del Partido Justicialista determinó que no haya internas, lo que representa la postura del gobierno. Por lo tanto, sus legisladores no le darán el gusto a los radicales que, en una movida maquiavélica, han cerrado la interna propia, pero, lo repetimos, la quieren hacer en coincidencia con la de la totalidad de los partidos. Para que ello ocurra hay que aprobar el proyecto del senador Víctor “El Gato” Luna. En esos afanes, se tentaría a algunos diputados que en el pasado funcionaban con el Frente Cívico y hoy lo hacen con el kirchnerismo (Cecilia Porta de Salas, Raúl Guzmán, Alfredo Gómez y Jorge Bonaterra, a los que se sumaría el barrionuevista Marcelo Rivera) a que voten junto al bloque radical. El método de convencimiento sería el del soborno, para lo cual los recursos podrían llegar desde otras latitudes. Obviamente, sería un escándalo de proporciones inimaginables.

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Las dudas por el nombre del candidato oficialista a diputado nacional despiertan interés. Cuando quedan apenas 48 horas para el cierre de las listas, lo que ocurrirá pasado mañana, a las postulaciones de Jorge Moreno y Gustavo Aguirre, se ha sumado con fuerza la de Octavio Gutiérrez, un paladar negro del peronismo que actualmente se desempeña como secretario de Estado de la Vivienda. Según reconocen propios y extraños, el natural de Aconquija (Andalgalá) viene cumpliendo una gestión dinámica y con resultados concretos en su área, lo que habría terminado de convencer a quienes toman este tipo de decisiones, entre los que naturalmente se encuentra Lucía Corpacci. También apuntan que con Gutiérrez se moviliza al conjunto del peronismo, lo que estaría respaldado por encuestas que supuestamente -no las conocemos, ni las inventamos- favorecen al Frente para la Victoria y hasta abren la chance de conseguir dos de las tres bancas que se pondrán en juego. Las pocas dudas que puedan quedar, de todas maneras, se disiparán en horas más cuando se produzca, en sede judicial, el cierre de las candidaturas.

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En los otros Frentes, se considera que el cierre de listas será un trámite. La Tercera Posición inscribirá a José Luis Barrionuevo, quien por afuera del peronismo buscará la hazaña de apoderarse de una banca, en tanto Eduardo Brizuela irá por la revancha radical. En ambos casos, únicamente faltaría determinar quiénes completarán la lista entre titulares y suplentes. El exgobernador tendría asegurada la banca, pero no el triunfo, para el que juega con fuerza el diario El Ancasti, que lo coloca como la figura política de mayor prestigio de Catamarca a través de una encuesta de dudosa credibilidad. Decimos esto porque la empresa que dicen que la hizo, Nueva Comunicación, es virtualmente desconocida entre las consultoras y por las preguntas que supuestamente realizó a la gente, claramente induce a la respuesta que al parecer pretende el diario, hoy frontalmente enfrentado con todo lo que tenga que ver con el kirchnerismo. Por ejemplo, se consulta si es conveniente que las cámaras legislativas estén en manos de la oposición. ¿Cuántos pueden contestar que no? Por allí, sin embargo, los números coinciden con las primarias, lo que no será el resultado del rigor científico, sino simplemente un acertijo. Debemos recordar que en esto de las encuestas no le va nada bien a El Ancasti. En la elección a gobernador de 2011, por otro relevamiento que devino trucho, adelantó la victoria de Brizuela del Moral quien, finalmente, terminó cediendo ante Lucía Corpacci.

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Otra de las incógnitas del cierre de listas es saber si algún radical se animará a discutirle la candidatura a Brizuela del Moral en las primarias del 11 de agosto. Hasta anoche, la posibilidad de que por ejemplo se presente el diputado José “Chichí” Sosa, se diluía por algunos aprietes que habrían llegado desde el Oeste. Alejandro Páez, el intendente de Andalgalá, tiene en sus cuadros administrativos a algunos seguidores de Sosa cuya estabilidad estaría dependiendo de los comportamientos del legislador. La oposición concreta de los disidentes a la actual conducción radical, en cambio, se presentaría en las provinciales de octubre. Podría hacer causa común con otros partidos que supieron conformar el Frente Cívico y armar listas en todos los departamentos, especialmente en aquellos ocho donde se elige senador. Esta idea puede cobrar fuerza con el resultado de las primarias ya puesto.

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“Están dadas las condiciones para la intervención”, ha dicho el senador de Antofagasta de la Sierra, Luis Rodríguez, después de que el intendente Carlos Fabián no concurriera a dar explicaciones en la Cámara alta. De esta forma, se reproduce un nuevo capítulo del enfrentamiento que mantienen los dos desde hace largos meses. Ahora bien, si Rodríguez y sus amigos esperaban que Fabián concurriera al recinto y se sometiera a un interrogatorio en plena campaña electoral, calcularon muy mal. Con esto no defendemos al intendente, que tendrá que hacerlo solo y dar cuenta de sus actos, sino simplemente planteamos poco menos que una misión imposible. Es que Rodríguez, que ya lleva cinco mandatos consecutivos (dos como intendente y los tres restantes como senador), pretende seguir atornillado en su banca y qué mejor que exponer a quien será su rival en pocos meses más. Por ello lo de la intervención -remedio extremo de la democracia- al municipio puneño, que ha planteado, es una exageración que no tiene la más mínima chance de concretarse.

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RECUERDOS HACIA EL PRESENTE. Terminamos los apuntes de este jueves patrio con el repaso de hechos políticos del pasado que pueden relacionarse con el presente.
“Cotejando planillas salariales de distintas provincias, se comprobó que Catamarca está al tope en cuanto a las remuneraciones”. Fue una de las conclusiones del V Congreso Regional de Recursos Humanos que se llevó a cabo en San Juan entre el 18 y el 20 de junio de 1988. A pesar de que en aquel entonces no había remesas automáticas de coparticipación, ni fondos sojeros o renta minera, los sueldos de los empleados públicos eran mucho más sólidos que ahora, a pesar de lo cual se daban manifestaciones, protestas y medidas de fuerza. Pero pongamos las cosas en su justo contexto. Si bien ya había llegado la política y los punteros funcionaban dentro del Estado, la cantidad de empleados era controlada por el gobierno alfonsinista. Durante los años siguientes, especialmente en los mandatos de Oscar Castillo y Brizuela del Moral, la situación se desbordó y ello fue retrasando el valor de los haberes, los que fueron salpicados por items no remunerativos que no existían 25 años atrás. De allí las conclusiones de aquel congreso de tierras cuyanas.

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También por aquellos tiempos del reinado saadista, el Partido Movilización era quizá el más combativo de todos. Uno de sus pronunciamientos hacía referencia al manejo de los dineros públicos. “El gobierno de la provincia no cumple con el deber político y constitucional de observar la obligación de publicar trimestralmente el estado de la Tesorería”, señalaba uno de sus documentos, en el que agregaba que la “flagrante violación” era instrumentada por el Poder Ejecutivo para “escamotear sistemáticamente toda información relacionada con el statu quo de las cuentas”. A los años, Movilización llegó de hecho al gobierno, como que tuvo vicegobernadores (Simón Hernández, Hernán Colombo), funcionarios y legisladores a granel. Empero, nunca más se lo escuchó referir estos temas que tanto le preocupaban en 1988.