La inauguración y puesta en funcionamiento de las nuevas instalaciones del Hospital de Niños “Eva Perón”, es una noticia que reconforta y merece la celebración de toda la comunidad catamarqueña.

El centro asistencial pediátrico por excelencia de la Provincia, es referente ineludible para la población: no hay catamarqueño que no haya asistido en algún momento a ese hospital, ya sea en su infancia o para llevar a algún pequeño.

Desde cotidianos malestares, como un resfrío fuerte o una fiebre que preocupa, hasta patologías severas o accidentes; todos reconocen el Hospital de Niños como una institución que ofrece seguridad, tranquilidad y pericia para atender a los chicos.
Que a partir de hoy cuente con más infraestructura, más comodidades, más equipamiento, es un logro extraordinario para Catamarca.

Porque el hospital, pese a todas las dificultades que quieran señalarse, sigue siendo un centro de atención público y gratuito, con todo lo que ello implica.

Un niño catamarqueño con problemas de salud, sea de donde sea e independientemente de la situación económica de su familia, tendrá allí quien lo asista.

Ello significa también que al Hospital de Niños, como patrimonio común de los catamarqueños, también hay que cuidarlo, y no sólo usarlo cuando se lo necesita. Acercarse para saber qué se puede aportar, cuidar sus instalaciones, visitar a los niños; preguntar en qué se puede colaborar con la cooperadora, son gestos importantes.

Hoy habrá funcionarios nacionales en Catamarca para participar del acto inaugural de la nueva infraestructura.
Se dirá que cuando asumió este gobierno nacional la obra ya estaba avanzada más allá del 90 por ciento de ejecución. Se recordará también la demora injustificada en la realización del tramo final de los trabajos.

Pero incluso los méritos políticos son una simple anécdota. El hospital será mejor desde hoy, y estará a disposición de los niños.
Eso es lo que importa, y por eso hay que celebrarlo, sin distinción de colores partidarios: la obra es una realidad que nos beneficia a todos.