Editorial

Termómetro

lunes, 22 de abril de 2019 00:00
lunes, 22 de abril de 2019 00:00

Hoy se celebra en el país el Día del Obrero de la Construcción, aunque el panorama general impide que haya una celebración real, porque los niveles de actividad están en su punto más bajo de los últimos años.


Este día reconoce la labor de una amplia gama de trabajadores, que incluye no sólo a los albañiles, sino a todos aquellos que unen sus oficios en torno a una obra.


Pintores, yeseros, parqueteros, marmolistas, escultores, modeladores, carpinteros, aserradores, colocadores de mosaicos, colocadores de vidrios, electricistas, calefaccionistas, picapedreros, y muchos otros se unieron a mediados de los años 40 para luchar unidos por sus derechos, en lo que marcó el nacimiento de la UOCRA, uno de los gremios más fuertes del país.
La construcción, como tantos otros rubros productivos, no pasa hoy por horas felices.


Peor lo que distingue a este sector es que históricamente sirve de termómetro de la situación general, entre otras razones por su enorme efecto movilizador de la economía.


Cuando la construcción se agiliza, se pone en marcha todo un círculo virtuoso de actividad. Naturalmente, cuando se frena, la recesión impacta también a gran escala, comenzando por las fuentes laborales.


Hoy, aunque la fecha sugiera festejar, lo único que emerge son preocupaciones. Los índices económicos dan cuenta de la recesión imparable en la que está sumida Argentina. La caída de la construcción es alarmante, y se traduce de inmediato en el derrumbe de las ventas al sector privado de insumos para la construcción.


Los materiales como ladrillos cerámicos, cemento portland, cal, aceros largos, carpintería de aluminio, pisos y revestimientos cerámicos, adhesivos y pastinas, pinturas impermeabilizantes, sanitarios, grifería y caños de conducción de agua, se desploma sin pausas.


Por otra parte, cayó sensiblemente la superficie autorizada por los permisos de edificación otorgados para la ejecución de obras privadas en los 60 municipios más importantes del país


La construcción es uno de los sectores más afectados por la recesión económica, y lo más triste es que las perspectivas a futuro tampoco son alentadoras.

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