El Secretario
Uno de los anuncios más fuertes del Gobernador Raúl Jalil pasó casi desapercibido en el discurso ante la Asamblea Legislativa, en parte porque son temas que se vienen manejando desde hace tiempo, y en parte porque naturalmente todo se opaca ante la magnitud de la pandemia y todo lo que implica la cuestión sanitaria. Sin embargo, se trata de una cuestión central para Catamarca, un territorio que, entre sus características naturales menos felices, muestra la crónica urgencia por los recursos hídricos, vitales para cualquier tipo de desarrollo, para la existencia humana y cualquier emprendimiento productivo.
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Jalil confirmó la decisión de avanzar con los estudios de factibilidad para la construcción de seis diques en el interior y uno en el área de la Capital, incluyendo las represas de La Herradura, La Florida, Paicuqui, la presa de arco-gravedad Río Hondo; Ampajango, Piedra Larga e Isla Larga. “Estamos convencidos de que el agua en Catamarca necesita inversiones para una mejor captación, más capacidad de almacenamiento, y desde allí una mejor administración”, sostuvo el mandatario, al momento de ratificar el rumbo en esta etapa preliminar de los trabajos, que luego requerirán la búsqueda de financiamiento, ya sea provincial o nacional.
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Para tomar real dimensión de la magnitud de estas obras, debe recordarse que en febrero de 2016, la Gobernadora Lucía Corpacci inauguró el Dique Las Tunas, en el departamento El Alto. Se trató de un hecho histórico porque había transcurrido casi medio siglo sin que se inaugurara un dique en la Provincia, lo que marca lo difícil que es crear nuevos diques, por la complejidad de los proyectos y por su elevadísimo costo. Pero cada dique es necesario, porque tienen un enorme impacto en la vida productiva y turística de la región, ya que se benefician los productores y las familias de varios departamentos. La regulación del agua, a su vez, permite atenuar el impacto de inundaciones y sequías. Es una gran noticia que se apunte a concretar estas obras, que sin duda cambiarán el mapa hídrico catamarqueño.
El Esquiú