Apuntes del Secretario
Apuesta cultural
Comenzará hoy una nueva edición de la Feria del Libro, una apuesta cultural muy fuerte que adquiere un significado relevante en tiempos en que niños y jóvenes cuentan con un abanico de plataformas de entretenimiento que tornan cada vez menos frecuente la afición por la lectura. Con el lema “Defiendo lo mío. Los libros como resistencia”, las actividades se realizarán desde hoy hasta el 13 de octubre en el Predio Ferial Catamarca. El salón Peregrina Zárate será el espacio principal donde desde hoy se instalarán más de 40 editoriales y librerías para exponer y comercializar libros de todos los géneros y temáticas, además de juegos didácticos y vinculados a la literatura. Un lugar especial lo tendrá la Dirección de Bibliotecas y Archivo de la Provincia, que se encargará de presentar una amplia variedad de títulos de autores y editoriales catamarqueñas. Con números musicales, espectáculos teatrales y variadas propuestas, la feria promete ser la más importante realizada hasta ahora, y existe gran expectativa por la respuesta del público. Paralelamente habrá un encuentro folclórico con otra edición del Ponchito, lo que suma interés para acercarse. Se trata de un encuentro más que interesante, en un rubro en el cual Catamarca comienza a fortalecerse y que puede servir también para enriquecer la oferta turística, al margen del movimiento cultural y de promoción de la lectura que naturalmente es el eje de la Feria. Una iniciativa para apoyar, con el fin de que Catamarca pueda seguir afianzándose en una temática a la cual recién se le comenzó a prestar atención en los últimos años. Sin ir más lejos, la Feria del Libro de Buenos Aires va por su edición 48, la Feria del Libro de Córdoba por su edición 38 y la Feria del Libro de Santa Fe por su edición 30, por citar algunos ejemplos. Aquí se marcha por edición 16, y es una buena noticia que se haya decidido trabajar para consolidarla. Ahora la participación del público dará el veredicto final.
Vetar o no vetar
Llegó el día clave para conocer la suerte de la Ley de Financiamiento Universitario, aprobada por el Congreso de la Nación y vetada en totalidad por el presidente Javier Milei. Hoy se considerará el veto en la Cámara de Diputados, y puede considerarse que en la sesión se definirá la suerte de la norma, ya que si no se logra rechazar el veto la iniciativa caerá definitivamente; en cambio, si se alcanzan los números para que los legisladores se opongan al veto, seguramente la ley se ratificará sin contratiempos en el Senado. El bloque oficialista, con el apoyo de Mauricio Macri, algunos radicales y bloques provinciales, confía en blindar la decisión de Milei. Sin embargo, el final de la votación es incierto y queda algún margen para creer en que el veto pueda caer. Todo dependerá de los votos y del nivel de asistencia, ya que deben alcanzarse los dos tercios sobre el total de diputados presentes. Los números son muy finos en una disputa por tercios y con un final abierto donde los cálculos se siguen minuto a minuto. Desde las bancadas opositoras que pidieron la sesión afirman que alcanzarán una porción muy amplia de los 257 diputados que integran la Cámara baja: una cifra que alcanzaría 160 diputados. Pero el oficialismo es también optimista y cree que encontrará el acompañamiento de más de 80 legisladores para ratificar el pulgar abajo del presidente. Las alternativas de la sesión concentran mucho interés en la sociedad, que hace pocos días movilizó más de un millón de personas en todo el territorio nacional, precisamente en defensa de las universidades y la reivindicación de la educación pública.
Deuda y más deuda
El ministro de Economía Luis Caputo, bautizado por Mauricio Macri como el “Messi de las finanzas”, resultó ser un Messi que no hace goles, o peor, sólo mete goles en contra. Protagonista del mayor endeudamiento de la historia argentina durante la gestión de Cambiemos, ahora Caputo marcha por el mismo camino y terminó por revelarse para qué envió tantas reservas de oro a Londres. Lo hace para buscar un nuevo préstamo, a fin de cumplir con los compromisos previamente contraidos. Es decir, tomará más deuda para pagar parte de otras deudas, un terrorífico espiral de dinero que desaparece y sepulta presente y futuro de los argentinos. El propio Caputo admitió esta semana que buscarán ir a un esquema Repo con algunos bancos, un tipo de préstamo a cambio de una garantía (el oro) que reduciría la tasa de interés. Así, el Gobierno intentará contar con el dinero necesario para pagar los primeros vencimientos de capital de enero en 2025. “Vamos a ir a un esquema Repo con algunos bancos, que es un financiamiento colateralizado que lo podés hacer a una tasa mucho más baja de lo que te costaría hoy refinanciar los bonos en el mercado. Como la tasa hoy es muy alta, estamos haciendo este refinanciamiento de Repo para que la tasa sea más baja”, confirmó Caputo. Los recursos servirían para afrontar los vencimientos de deuda proyectados para 2025, en un escenario en el que todavía no está claro que vaya a configurarse un nuevo acuerdo con el FMI.
Transporte en crisis
La Mesa Nacional del Transporte convocó para el 30 de octubre un paro nacional por el cual quedarán paralizados los servicios de camiones, trenes, aviones y barcos en todo el país. La decisión se tomó en un encuentro con la presencia de Pablo Moyano y Omar Pérez (camioneros); Juan Pablo Brey (Aeronavegantes); Omar Maturano (La Fraternidad); Juan Carlos Schmid (Fempinra); Roberto Coria (Guincheros); Pablo Biró (APLA); Beto Pianelli y Néstor Segovia (Metrodelegados); Raúl Durdos (SOMU); Marcelo Pariente (motoqueros), Jorge García (Taxistas) y Graciela Aleñá (Viales). Se sumarían luego los colectivos, que no adhirieron todavía porque UTA está negociando un aumento salarial. La medida es en defensa de Aerolíneas Argentinas, y se da en simultáneo con la desregulación del transporte de media y larga distancia, que abre una incógnita sobre el futuro de los servicios, ya que cuando la norma entre en vigencia las empresas podrán tomar las rutas que quieran y fijar los precios que les parezca. La decisión se presentó como una libre competencia que favorecerá a los usuarios, pero ello es una gran incógnita, del mismo modo que se cuestiona quiénes cubrirán los destinos menos rentables. Un mapa que remite a aquella definición de Menem: “Ramal que no rinde, ramal que cierra”.
El Esquiú.com