Fines de junio de 2024. El departamento Ancasti fue el punto elegido para que los dirigentes de la Unión Cívica Radical (UCR) se reunieran para analizar la situación actual, tanto del partido como de la provincia y el país. También para plantear la necesidad de la unificación partidaria y en contra de la aparición de las líneas internas que no suman. Con Rodolfo Santillán como anfitrión, el conclave radical contó, entre otros, con Alfredo Marchioli (presidente de la UCR), Luis Fadel y Alicia Paz (miembros del Comité Provincia), los diputados Silvana Carrizo, Natalia Herrera, Tiago Puente, Mamerto Acuña; el senador nacional Flavio Fama; el rector de la UNCA, Oscar Arellano. Además, contó con la reaparición del dirigente Víctor Luna. Entre los ausentes, estuvieron el diputado nacional Francisco Monti; los diputados provinciales Carlos Marsilli y María Gómez; el referente de Morada, Roberto Gómez. Se sumaron el senador Ariel Cordero, Leonardo Perea Santillán y Araceli Parra (concejales), Adolfo Piñero (presidente del Comité Departamental Ancasti), Eduardo Santiago (Comité de Santa Rosa), Tavino Villalba (Comité de La Paz), Rubén Medina (Comité de El Alto); los concejales Augusto Ahumada y Nicolás Aguirre (El Alto), Yamil Mansilla (Icaño),  Luis Ledesma (Recreo); y demás autoridades partidarias, exlegisladores y exintendentes, entre otros. En la reunión se resaltó el compromiso de “trabajar la UCR de forma unida para constituir una oposición fuerte y sólida frente al oficialismo”. Otro punto que se puso de relieve por parte de los “boinablanca” fue la disconformidad con la proliferación de líneas internas que no suman al partido y se subrayó la importancia de unificar las fuerzas para crear un partido que acompañe las necesidades de la gente, convirtiéndose en una opción viable de gobierno. 

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Mediados de septiembre de 2024. Flavio Fama acusa al presidente Alfredo Marchioli de destruir y querer vender el partido. Lo llama “monigote” y “mamarracho”. Marchioli dice que Fama habla por resentido. ¿Qué sucedió con aquel acuerdo de unidad y de poner fin a las rencillas que no suman? Nadie lo sabe. La UCR, que viene de hacer un papelón inédito en las elecciones, vuelve a sumergirse en peleas mezquinas y es incapaz de diseñar un proyecto serio de provincia. Vaya como atenuante que casi todos están igual, desde los peronistas hasta los libertarios, pero aquí hace más ruido por el compromiso que se había asumido y que, por lo visto, se esfumó en tiempo récord.

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