Los directivos de las escuelas N°362 de Costa de Reyes y N°91 “Cornelio Saavedra” de Villa Luján, al oeste de Tinogasta, dejaron ver su preocupación por la baja matrícula con la que cuentan en la actualidad ambos establecimientos educativos. Una de las escuelitas sólo tiene doce alumnos, mientras que la otra apenas llega a los cinco niños.
Luisa Álvarez, directora de la Escuela Nº362 de Costa de Reyes, y Emilia Ortiz, de la Escuela N°91 de Villa Luján, coincidieron en que el motivo de esta falta de alumnos en las escuelas que conducen se debe a que la mayoría de las familias busca otros horizontes ante la falta de posibilidades laborales en los pueblos.
“El motivo de la baja matrícula se debe a que las familias buscan nuevos horizontes, para conseguir una fuente laboral”, contó Álvarez.
Luego, agregó que “si bien desde la ruralidad hoy es de un gran atractivo este lugar por su belleza para el turismo, si no tenemos políticas de trabajo turístico en la zona, de nada nos sirven estas bellezas naturales vírgenes, este microclima que tiene el pueblo, entonces la gente, principalmente los más chicos y nuestros jóvenes, se nos van. Antes, generalmente quedaban los niños y los ancianos, pero ahora notamos que hasta los niños se nos están yendo”
Por otra parte, las docentes comentaron que a pesar de todo, han notado una asistencia perfecta de los niños a las clases, pero que como la escuela les brinda el desayuno y el almuerzo, tal vez se deba a ello y porque quizá sea el único alimento que reciben en el día. “La asistencia a clases es perfecta, ya que en la escuela ellos encuentran el desayuno, el almuerzo con postre, tal vez sea el único alimento que tengan en el día”, acotó Álvarez.
Por su parte, Emilia Ortiz, directora de la Escuela Nº91 “Cornelio Saavedra” de Villa Luján, aseguró que “los pocos niños que quedan en el pueblo aún permanecen trabajando en el cerro, cuidando cabras”.