Tal cual lo habían expresado a lo largo del proceso de conciliación, que culminó el martes sin llegar a un acuerdo, los gremios docentes comenzaron a analizar las acciones que tomarán en reclamo de la recomposición salarial del 30%, porcentaje del que no se movieron desde el inicio de las negociaciones en febrero.
La decisión de ir al paro está tomada y sólo es cuestión de decidir la modalidad y duración de la medida de fuerza. “Aunque todavía estamos en ronda de consulta con las bases, el paro está descontado. Nos tenemos que reunir para hablar sobre cómo se encarará y desde cuándo”, señaló Jorge Molas, secretario gremial de ATECa, quien participó ayer de una reunión en Andalgalá, en el marco del diálogo con las seccionales en cada departamento.
El principal gremio docente de Catamarca convocó hoy a sus referentes a un encuentro a partir de las 9 en la sede de calle Zurita, en donde se tomarán las decisiones de organización de la medida, a aplicarse posiblemente desde la próxima semana. La idea del sindicato que lidera Nancy Quiñones es invitar a sus pares y a trabajadores estatales de otras reparticiones a sumarse. “La idea es hablar sobre la medida de fuerza internamente y después se invitará al resto, para hacer una gran movida en defensa de nuestros salarios,” señaló Molas.
Otros sindicatos ya decidieron también realizar algún tipo de acción de reclamo. Por caso, desde SUTECa y UDA informaron que se encuentran en estado de alerta y movilización para la segunda semana de abril. Asimismo, expresaron malestar por la falta de acuerdos, más allá de lo salarial, en lo que concierne a lo pedagógico y académico, y consideraron que desde Educación “tienen que decidir si van a seguir adelante con todas las irregularidades”.
Victoria Vélez, secretaria adjunta de UDA, expresó: “Estamos en estado de alerta y movilización; por los plazos legales, creemos que la segunda semana de abril vamos a paro”. Por su parte, Nilda Escotorín, delegada gremial de SUTECa, comentó que desde el ministerio “se sigue como si nada hubiera pasado; él (por José Ariza) conoce y fue parte de la gestión y sabe cada uno de los puntos más vulnerables que tiene la educación. No estamos en condiciones de seguir soportando más vulnerabilidad del estatuto del docente y de cualquier trabajador de la educación”.
Este malestar viene ligado también a la Asamblea de Reasignación de Horas en la escuela Clara J. Armstrong, donde los gremios solicitaron la anulación del acto por “irregularidades en el proceso”, en el cual la mayoría de los docentes con el apoyo de los gremios realizaron la solicitud a las autoridades de Educación. Sin embargo, Claudia Bolomo, subsecretaria de Gestión Educativa, decidió continuar en la opción de cargos.
Para SUTECa, esta asamblea se realizó “de manera irregular, donde los procedimientos administrativos no han tenido los pasos legales que corresponden según el estatuto”.
“En la asamblea se leen resoluciones emitidas en horas de la mañana, y los docentes recién tomaban conocimiento de los distintos perfiles que decía esa resolución. Lo grave es que la mayoría eran docentes de muchos años y titulares. Es una asamblea muy particular, porque es gente que está en disponibilidad de sus tramos educativos, nunca se dio en discusión cuáles eran los perfiles”, mencionó la dirigente.
Además, Escotorín explicó que “no dieron lugar a una junta de clasificación que está con mandato vencido y siguen tomando decisiones de llevar adelante este tipo de cosas, que si nosotros lo llevamos a la Justicia, lo ganamos desde cero. La constitución de la propia Junta de Clasificaciones es la que está mal concebida, lo conoce el ministro actual por haber sido parte de la gestión anterior y sabe que hemos denunciado esto y es uno de los puntos paritarios que no se llevaron a cabo”.
De este modo, se reprochó que no dieran lugar a la impugnación y a la suspensión, “y las cosas siguen avanzando para mal”. Dada la disconformidad, se presentó la subsecretaria Claudia Bolomo, quien decidió por orden del ministro llevar adelante la asamblea.

Universitarios

Docentes universitarios y preuniversitarios de escuelas que dependen de la UNCa realizaron ayer la segunda jornada del paro por 48 horas convocado por la CONADU histórica, en reclamo de distintas cuestiones no atendidos por las autoridades.
De acuerdo con lo que manifestaron en un comunicado del Gremio Docente Universitario (GDU), la medida de fuerza tuvo un “acatamiento casi total en el nivel preuniversitario y del 90% en el nivel universitario”.
Entre los reclamos, figura un aumento salarial inmediato del 30%; el “inicio de la recuperación salarial que permita acceder a la media canasta familiar para el cargo testigo”; paritarias sin tope salarial; salarios para docentes ad-honorem; incorporación de cesantes, y titularización en los niveles preuniversitarios”, entre otros.