Con muy poca edad, Hugo Nanni ya despuntaba el vicio que representaba tocar la guitarra. El tiempo, siempre testigo fiel, lo encuentra transformado en uno de los principales valores folclóricos del cancionero de Catamarca. Nacido en Las Chacras catamarqueñas, arrullado por coyuyos. En la década del ´70 tuvo la posibilidad de cantar en el Festival Nacional del Poncho.
Luego llegó su participación en diferentes agrupaciones como Los Copleros, Las Voces del Valle y otros conjuntos. Años más tarde. Integró el mítico conjunto Catamarca Tres, con quienes llegó a cantar en el Festival OTI de la Canción, organizado en aquel entonces por Canal 9 de Buenos Aires. En su carrera cuenta con un material discográfico denominado Copla y Vida. Actualmente, es una de las voces con mayor experiencia y más reconocidas del medio folclórico local.

- De muy chico fue un admirador de la guitarra. ¿Recuerda el primer instrumento que tuvo en sus manos?
- La primera vez que tuve una guitarra fue gracias a mi hermano, que me la regaló. Se llamaba “Inca” y de ahí empecé a cantar en la escuela, en algunas peñas… pero todavía nada de profesionalismo. Después comencé a integrar algunos conjuntos folclóricos, en el año 1977.

- ¿Qué edad tenía cuando le regalaron esa guitarra?
- Era más chico que mi hermano, así que habré tenido unos 15 años. Desde ese día ya me comenzaba a gustar y comencé a aprender mis primeras notas. Pero aprendí mirando y le agradezco tanto a Dios que me dio la oportunidad de tener esta virtud de poder poner música a tantos poemas que me acercaban y letras de canciones.

- ¿Cuánto tiempo le llevó aprender a tocar?
- Entre guitarreadas de amigos, en la escuela, asados; así aprendí ha tocar la guitarra y después cante temas como “coplas y vida”. Luego me inicié con los hermanos Andrada, en un concurso que se hacía en la fiesta de El Poncho en la Manzana del Turismo, luego concursé en el “Aguardiente”, con Los Copleros, después integré con Las Voces del Valle, con Villafáñez. Y con todos estos grupos adquirí mucha experiencia y de ahí comencé a cantar como solista porque ya me animaba a tocar la guitarra y a cantar. En el ‘83 me integré a Catamarca Tres.

- Ese fue uno de los grupos más importantes que tuvo la provincia ¿Cómo se siente haber integrado la época de oro del grupo?
- Cuando recién comenzaba a surgir el grupo, para mí era algo novedoso, porque a mí me gustaban las voces de los changos, además me gustaba el estilo de ellos. Con Catamarca Tres dejé ahí mi granito de arena, marcó una etapa de mi vida muy linda, porque con el grupo pude tocar en Jesús María, Cosquín, en el Festival de la Canción en Buenos Aires, que era muy importante porque era Nacional e Internacional; en el Poncho hemos tocados muchísimas veces y en Jesús María fuimos de la mano de Luis Oscar Aiza alrededor de 7 años... Además de estar en la Chaya en La Rioja y todos los festivales importantes del país.

- ¿Cómo lo trataba el público a Catamarca Tres?
- En ese tiempo no era muy conocido el grupo, con el tiempo se comenzó a imponer ante el público por las voces y las guitarras. Entraba yo con mi guitarra acompañado por Morales.

- ¿Por qué se alejó de Catamarca Tres?
- Me desvinculé del grupo porque quería ser solista y hubo unos pequeños cruces entre los integrantes, cosas que pasan en toda banda ,y de ahí decidí comenzar a cantar solo.

- Si tuviera que elegir ¿Con qué se queda, con la guitarra o el canto?
- Es un complemento para mí de tocar y cantar a la vez. Pero tengo una virtud, puedo ser primera guitarra o acompañante, además de poder ponerle música a la letra. Poner música a un poema o a una letra es algo inexplicable, porque a veces uno se levanta inspirado y compone música de la mejor manera.

- ¿Recuerda el primer tema que sacó con la guitarra?
- Me acuerdo en ese tiempo que escuchaba Rueda, Carlitos Martínez… la primera zamba que aprendí fue “el bombito”.

- ¿Qué siente usted al ser tenido en cuenta como el mejor guitarrero de las chacras?
- No se si seré el mejor, pero siempre le canto a mi tierra. Siempre que viajo a otras provincias le canto a Catamarca.

- ¿Qué nos puede decir acerca de su conversación con Atahualpa Yupanqui?
- Fue algo raro lo que nos sucedió. Era en el camarín de Cosquín y estaba con Catamarca tres y él llegaba de Francia para cantar en el festival. Cuando lo vimos pasar al lado nuestro con la guitarra no nos dimos cuenta en ese momento en sacarnos una foto con Atahualpa, aparte era una persona muy simple y hemos conversado un largo rato con él, y Yupanqui nos dijo, “sigan cantándole a la tierra, expresen lo que ustedes sienten por su tierra”. Desde ese día comencé a cantarle a mi tierra, a pesar que muchos cantantes de Catamarca le cantan a otras provincias. Nunca entendí esa forma de cantar de los catamarqueños.

-Usted tiene una canción que se la dedicó a su madre
- En el disco que estoy grabando ahora me motivó mucho ese tema que le canto a mi madre. Cuando estaba haciendo la mitad de la grabación del tema la soñé a mi madre y no sé si ella me dio el impulso para terminar la canción.

- ¿Qué es la guitarra para usted?
- Sin que se ponga celosa mi familia, la guitarra es mi vida porque la llevo en el alma y espero que mi nieto me salga cantor y guitarrero.