Jorge Rial y Luis Ventura durante muchos años no solo fueron socios, sino también qu grandes amigos. Sin embargo, un día ese vínculo llegó a su fin en medio de un gran escándalo y desde entonces no volvieron a hablarse. Hace unos días el ex conductor de Intrusos habló del tema.

En diálogo con Infobae, Rial contó si en algún momento se reconciliaría con Luis: "Seguramente. Yo lo quiero mucho a Ventura y él a mí también. No sé si hoy necesitamos estar juntos. Es un tipo al que no voy a dejar de querer nunca. Y él puede decir las cosas mías y a mí me divierte porque sé quién es el Gordo. Lo quiero. Y él me quiere a mí. Y sé que lo dice solamente para joderme un rato". 

Y contó: "Seguramente se va a dar, pero tiene que ser naturalmente. Yo no quiero que me insistan ni que me ofrezcan una nota o una tapa con Ventura. Nos encontramos 500 veces ya, nos abrazamos, charlamos. Después, tenemos diferencias: APTRA, Martín Fierro. Pero es para la gilada eso, no es contra él". 

Pero no todo quedó ahí porque Luis Ventura decidió responderle: "No se lo acepto. No hay reconciliación porque me dijo gordo". Fue en el programa de Karina Mazzocco donde el panelista decidió hablar sobre el vínculo que mantuvo en algún momento con Jorge Rial durante muchos años. 

Fue entonces que la conductora confesó: "Nunca vi esta situación tan cerca. El otro día vos dijiste que lo querés. Ahora él te dice que te quiere a vos. Me parece que esto es cuestión de ponerle fecha". Lejos de mostrarse ilusionado, Luis Ventura decidió responder sin ningún tipo de filtro. 

"Es que yo no tengo que poner nada. Yo nunca me peleé. ¿Qué diferencias? Me pegó una patada en el culo (de Intrusos). Esto está refutado por mis hijos y por muchos integrantes de mi familia, que me dicen que soy un pelotudo. Y Es bien posible. ¿Pero quieren que vaya en contra de esto (se toca el corazón? Acá se siente lo que uno quiere vivir", reveló. 

Muy sincero y a corazón abierto, Luis Ventura había confesado lo mucho que quiere a Rial sin importar todo lo que pasó entre ellos: "Si yo viví 40 años con un ‘garca’, bueno, yo a los amigos los quiero o no los quiero, y aprendí a quererlo. Me cuesta renunciar a 40 años de amistad".