Al comienzo de Gran Hermano, Thiago Medina se había posicionado como uno de los grandes favoritos de la audiencia para tener un lugar en la final. Sin embargo, su juego lo traicionó y su imagen se vio perjudicada.

Como consecuencia de sus tropiezos, mucho antes de lo pensado, abandonó la casa, por decisión del público. Tras su salida, Thiago participó como invitado de LAM, para contar su experiencia dentro de Gran Hermano. 

Ante las preguntas formuladas por Ángel de Brito, Medina se mostró predispuesto a responder todo y a hablar de todos los temas sin tapujos. Si bien, varias de las consultas estaban referidas al juego, también se ahondó en los vínculos que florecieron dentro de la casa.

Durante el ida y vuelta entre Ángel y Thiago, apareció desde un móvil Marisa Bel, quien aprovechó la ocasión para hablar sobre lo que opina de algunos participantes, en especial de Romina.

En este contexto, el conductor del programa le consultó a Medina por Romina y si la ve como una posible ganadora del reality. A lo que Thiago, de manera contundente admitió que no considera que la oriunda de Moreno llegue a consagrarse campeona de Gran Hermano.

Asimismo, con la sinceridad a flor de piel, el ex participante, dejó en claro su favoritismo y lanzó los nombres de los compañeros que desea que logren alcanzar el primer puesto. "A mi me gustaría que gane o Nacho o Dani, otra persona la verdad que no", aseguró Thiago. 

Si bien las consultas estaban referidas a las diferentes estrategias, también hicieron hincapié en la relación que Medina mantenía con Nacho, ya que muchos aseguraban que se trataba de algo mas que una amistad. Thiago aprovechó la ocasión para aclarar: "Con Nacho somos muy amigos. Los dos tenemos la misma edad, la misma mentalidad, somos grandes pero a la vez nos gusta disfrutar el momento, y joder con lo que podamos joder. Todo eso nos unió mucho".

"A mí no me gustan los hombres, pero me divierte, me gusta hacer reír a mis amigos. Tuvimos una conexión de amigos muy fuerte. Yo hacía algo, y él hacía lo mismo, desayunábamos juntos, compartíamos mucho tiempo, y por eso mi partida le hizo mal. Disfrutábamos estar con el otro, no como pareja, sino como amigos. Realmente fue una conexión como si hubiéramos sido amigos desde los dos o tres años", concluyó Thiago.