Luis Ventura reveló cómo es la difícil situación que vive su hijo Antonito
El conductor abrió su corazón y contó los detalles de la salud del pequeño.Luis Ventura, reconocido periodista con una extensa trayectoria en los medios, vive uno de los momentos más difíciles de su vida familiar. Su hijo Antonito, fruto de su relación con Fabiana Liuzzi, fue internado en las últimas horas, lo que ha generado una gran preocupación en el mundo del espectáculo y en el círculo íntimo de Ventura. La noticia tomó aún más relevancia debido a las declaraciones de ambos padres sobre la delicada salud del niño, quien nació prematuro y ha enfrentado diversas dificultades a lo largo de sus 10 años.
En diálogo con el programa A la tarde (América TV), Ventura no pudo contener las lágrimas al hablar de la situación de su hijo. Antonito nació a los seis meses y medio de gestación, pesando tan solo 700 gramos, y desde entonces ha vivido bajo cuidados médicos especiales. El periodista explicó con detalle las complicaciones que su hijo ha tenido que enfrentar debido a su nacimiento prematuro, incluyendo un diagnóstico que, aunque confuso, incluye elementos de autismo y encefalopatía crónica.
“Estamos en presencia de un niño que nació muy prematuro, a los seis meses y medio, un niño que estuvo en incubadora y que pesaba 700 gramos. Ha tenido que usar elementos complementarios para empezar a formar su cuerpo”, comenzó relatando Ventura, visiblemente afectado. Además, explicó que Antonito ha enfrentado infartos en uno de los hemisferios de su cerebro, lo que le dejó cicatrices que están en proceso de sanar y que, a medida que se recupera, le permiten recuperar ciertas funciones. “Está recuperando funciones en ese proceso de cicatrización”, señaló el periodista.
Fabiana Liuzzi, la madre de Antonito, también compartió su angustia en las primeras horas de la internación del niño, explicando que la situación se agravó luego de un cambio en la medicación del menor. “Arrancó el fin de semana. Algo le molestaba, estaba irritable. Coincide con que le quitamos una medicación que tomaba a la noche”, detalló. Además, confesó haber experimentado un cuadro de estrés debido a la preocupación por la salud de su hijo. "Me atendían a mí en una cama y a él en otra, me faltaba el aire, tenía palpitaciones", agregó.
Una de las dificultades que Ventura destaca sobre la vida diaria con Antonito es la complejidad de la comunicación. Aunque el niño no ha desarrollado el habla, se expresa mediante sonidos y gestos, lo que exige un esfuerzo constante de interpretación por parte de sus padres y cuidadores. “Tengo un hijo de 10 años que todavía no habla, pero se hace entender. Hay que saber interpretar su lenguaje, porque si no, puede tener un episodio”, explicó. Ventura describió estos episodios como estallidos de enojo o dolor que, al no poder ser expresados verbalmente, resultan difíciles de manejar.