La mesa de Mirtha Legrand volvió a encenderse con un momento televisivo que ya da que hablar. En plena discusión sobre economía y legislación laboral, la diva de los almuerzos no dudó en ponerle los puntos a uno de sus invitados, el diputado liberal José Luis Espert, cuando una frase suya la incomodó por completo.

Todo comenzó cuando Espert exponía su postura crítica hacia las leyes laborales vigentes. "Otra mentira que nos han hecho creer es que tenés que tener estas leyes laborales de hace 80 años para que no haya violación a los derechos del trabajador", lanzó con firmeza. Sin embargo, la mención al “hace 80 años” desató la rápida reacción de Mirtha.

“¿Cuándo dijiste 80 años me señalaste?”, interpeló la conductora, mirándolo con seriedad. La pregunta, cargada de ironía y precisión, tomó por sorpresa al diputado, que se mostró visiblemente incómodo. “Mirtha, mirá el medio vaso lleno, te tiré una flor. Vos tenés más de 80 y te dije 80”, intentó justificar Espert con humor, pero no logró aliviar el momento.

Legrand, lejos de dejar pasar el comentario, respondió de forma tajante: “¡Basta!”. Su gesto y tono fueron suficientes para frenar cualquier intento de distensión. El cruce dejó en claro, una vez más, que a Mirtha no se la pasa por arriba, ni siquiera en temas técnicos.

A pesar de la tensión, el diputado continuó con su análisis. Apuntó contra el sistema de retenciones y los beneficios ocultos para algunos sectores: “Hay gente a la que le conviene esto. Así pueden pagar salarios más bajos, porque si el alimento fuera más caro, no podrían”, aseguró, generando revuelo en la mesa.

También se refirió a la Unión Industrial Argentina, sin medias tintas: “Para muchos vivillos como los de la UIA, les conviene tener el alimento más barato de lo que sería hoy. Es un pescado podrido que nos han hecho creer”, disparó.

El cruce con Espert se suma a la larga lista de momentos filosos que han convertido a Mirtha en una figura única de la televisión. A sus 97 años, sigue marcando la agenda con su estilo inconfundible: directa, sagaz y sin pelos en la lengua.