En las últimas horas, un nuevo escándalo sacudió el mundo de la farándula y el fútbol argentino: Wanda Nara fue vinculada sentimentalmente con Leandro Paredes, y las redes estallaron. Sin embargo, quien decidió tomar la palabra, aunque sin mencionarla directamente, fue Camila Galante, la esposa del mediocampista de la Selección Nacional.

Todo comenzó cuando, en el programa DDM (América TV), se deslizó la versión de que Wanda habría intentado conquistar a un jugador argentino. “Le escribió y él, fiel a su pareja, le mostró el mensaje. Después, su mujer se encargó de contárselo a las otras esposas”, afirmaron en el ciclo conducido por Mariana Fabbiani. 

El jugador en cuestión sería Paredes, quien milita actualmente en la Roma de Italia. Las consecuencias no habrían tardado en llegar: “Wanda fue declarada no grata en el grupo de esposas de la Selección”, aseguraron desde la producción. Y aunque ni el futbolista ni Nara hicieron comentarios públicos, fue Galante quien respondió con un sugestivo contraataque en redes sociales.

Primero, subió una imagen en la que se los ve a ambos disfrutando de un almuerzo íntimo. “Almuercito con él”, escribió sobre la foto en la que se los ve sonrientes, acompañados por un postre tentador. Luego, otra historia desde un ascensor terminó de sellar el mensaje: “Te amo”, junto a un corazón azul.

Sin necesidad de aclaraciones directas, la esposa de Paredes dejó entrever que la relación entre ellos está más sólida que nunca. El gesto fue leído por muchos como un pase de factura elegante, pero firme, hacia la Bad Bitch y hacia quienes se hicieron eco del rumor.

“Cuando una sabe lo que tiene en casa, no necesita salir a explicar nada”, habría dicho Galante a su entorno, según trascendió en medios cercanos al círculo de las esposas del seleccionado.

Por el momento, la empresaria dueña de Wanda Cosmetic guarda silencio, mientras Paredes sigue enfocado en las eliminatorias para el próximo mundial. Pero una vez más, el cruce entre el universo del fútbol y el de la farándula volvió a dejar tela para cortar. Y Camila Galante, lejos de esquivar el tema, lo enfrentó con sutileza y amor propio.