La policía y efectivos de las fuerzas armadas, comandandos por el gobierno de facto autoproclamado tras el golpe de Estado en Bolivia en el que derrocaron a Evo Morales, reprimieron este viernes una marcha de miles de cocaleros que intentaron bajar a la ciudad de Cochabamba dejando como saldo cuatro muertos, más de una decena de heridos y un número por ahora desconocido de detenidos.

Según la agencia Bolpress, los enfrentamientos se produjeron en las cercanías del puente Huayllani, a unos 10 kilómetros de Cochabamba. Más de cinco mil productores de coca intentaron rebasar el cerco policíal.

Las fuerzas de la dictadura boliviana lanzaron gases lacrimógenos. Los cocaleros utilizaban palos y piedras como armas, además de algunos cachorros de dinamita.