Un sujeto caminaba por las calles de Inglaterra cuando lo sorprendió la presencia de un animal en una zanja. Se acercó y notó que se trataba de un búho que no podía volar por su peso.

Ante esta situación pidió la intervención del Santuario de Búhos de Suffolk. Allí informaron que se trataba de una hembra mochuelo europeo, también conocida como Athene noctua, detalla CNN.

Para sorpresa de los profesionales el ave pasaba un tercio más que un ejemplar adulto sano. En un principio creían que estaba lesionado y por eso no volaba pero lo que se lo impedía era su peso: los 245 gramos. 

Luego de analizarlo, no encontraron signos de que haya vivido en cautiverio. “En estos casos suponemos una especie de lesión que impide que la lechuza vuele, por lo que puede imaginar nuestra sorpresa de que cuando la examinamos, descubrimos que simplemente era extremadamente obesa“, detallaron en Facebook.

Al mismo tiempo remarcaron que el sobrepeso se debía a una abundancia de alimentos encontrados en su entorno natural ya que en el lugar que lo encontraron se registró una plaga de ratones de campo. 

Para que el ejemplar recuperara la libertad, los profesionales lo sometieron a una dieta estricta: “Ahora podemos decir felizmente que se ha reducido a un peso más natural para la liberación“, concluyeron.