Donald Trump, presidente de Estados Unidos, pidió este martes a la Asamblea General de la ONU que "responsabilice" a China por la pandemia de coronavirus porque, según afirmó, el gigante asiático permitió que el virus "infecte al mundo".

"El Gobierno chino y la Organización Mundial de la Salud, que virtualmente está controlada por China, declararon falsamente que no había evidencia de transmisión entre humanos", dijo el mandatario estadounidense en un mensaje de video pregrabado, informó la agencia de noticias AFP.

"Después, dijeron con falsedad que las personas sin síntomas no propagarían la enfermedad. Naciones Unidas debe responsabilizar a China por sus acciones", instó el republicano, que busca su reelección en noviembre y cuyo país es el más afectado en el mundo por la pandemia de coronavirus.

Apenas a 40 días de la cita con las urnas, y con el trasfondo de una gestión de la pandemia ineficiente y descoordinada para sus críticos, tema que puede ser clave en el voto, el republicano insistió en apuntar a China.

También acusó a la OMS de complicidad con Beijing y aseguró que la organización -que está bajo el paraguas de la ONU- está "controlada" por China.

El presidente también dijo que su país está cumpliendo su "destino" como "pacificador" del mundo, al destacar ante la Asamblea General iniciativas como la normalización de relaciones diplomáticas entre Israel, Emiratos Árabes Unidos y Bahréin en Medio Oriente y las negociaciones de paz en Afganistán.

Trump dijo que "con enfoques diferentes" en estos conflictos su Administración logró "resultados diferentes" y muy superiores a los obtenidos en el pasado.

"Durante décadas, las mismas voces cansadas propusieron las mismas soluciones fallidas, persiguiendo ambiciones globales a costa de su propia gente. Pero solo cuando cuidas de tus propios ciudadanos puedes encontrar una verdadera base para la cooperación", señaló.

El mandatario destacó los llamados Acuerdos de Abraham, sellados este mes por Israel con Emiratos Árabes Unidos y Bahréin, un paso impulsado por su Gobierno dentro de su estrategia para abordar el conflicto palestino-israelí, del que, no obstante, no participaron los palestinos que lo rechazan tajantemente.

También aseguró que habrá "más acuerdos pronto" y destacó que Medio Oriente está viviendo su mejor momento gracias a estos movimientos tras décadas de bloqueo, a pesar del recelo que han generado esos pactos entre los palestinos.

También puso sobre la mesa los avances hacia la paz en Afganistán, el retiro de las tropas estadounidenses de ese país y el reciente acuerdo entre Serbia y Kosovo para normalizar sus relaciones económicas, bajo mediación de Estados Unidos.

Según Trump, todos esos progresos hacia la paz se lograron desde una posición de "fuerza", que Estados Unidos logró entre otras cosas reforzando su Ejército y dotándose de armas sin parangón.

"Solo rezo a Dios para que nunca tengamos que usarlas", apuntó el político republicano en un mensaje que duró aproximadamente siete minutos.

Por su parte, el presidente de China, Xi Jinping, adoptó un tono conciliador en su discurso virtual pregrabado ante la Asamblea General, pidiendo una mayor cooperación sobre la pandemia y subrayando que China no tenía ninguna intención de librar "ni una Guerra Fría ni una caliente" con cualquier otro país.