La policía española informó el viernes de que había detenido a uno de los diez fugitivos más buscados por el FBI estadounidense, que se alojaba en un hotel de Madrid con una identidad falsa.

Michael James Pratt, ciudadano neozelandés, había sido condenado a cadena perpetua por pornografía infantil, explotación sexual y agresión sexual en Estados Unidos.

La policía dijo que había estado involucrado en la producción audiovisual de pornografía, reclutando a niñas menores de edad y mujeres jóvenes mediante engaños entre 2012 y 2019. Actividades con las que ganó más de 17 millones de dólares.

Solo 57 criminales de la 'lista de los más buscados' del FBI han sido detenidos fuera de la jurisdicción de esta institución, dijeron las autoridades españolas, y agregaron que era la primera vez que esto ocurría en España.

La policía dijo que el fugitivo puso anuncios en internet ofreciendo trabajos de "modelaje", que resultaron ser grabaciones pornográficas.

Pagaba a otras mujeres para que actuaran como "cebo" y que convencieran a las víctimas de que el material grabado no se publicaría en internet.

En ocasiones, las víctimas eran retenidas contra su voluntad y obligadas a realizar prácticas sexuales a las que previamente habían negado expresamente su consentimiento, según la policía.

Fuente: Reuters.