Las Vegas, Orlando, Blacksburg, Connecticut. Estos son sólo algunos de los lugares donde ocurrieron los tiroteos masivos más mortíferos de los últimos años. El Archivo de la Violencia Armada (GVA, por sus siglas en inglés) estima que en lo que va del año hubo al menos 329 ataques en Estados Unidos. Esto es, más tiroteos que días del año.

Las estadísticas del año 2020 revelaron que solo en ese año murieron 19.384 personas por homicidio. Lo cual lleva a un largo debate, ya que en la Segunda Enmienda se remarca la importancia y el derecho a la vida, sin embargo contrario a esto, cada habitante tiene el derecho constitucional de portar un arma.

Más de un arma por persona:
Según la Oficina del Censo de Estados Unidos y Small Arms Survey, el país representa menos del 5% de la población mundial, pero acumula el 48% de las armas de uso privado de todo el mundo.

Otro dato impactante. En Estados Unidos hay más armas que ciudadanos. Los mismos relevamientos citados anteriormente indican que en el país hay cerca de 390 millones de armas de fuego mientras que la población ronda los 333 millones de habitantes.
Un estudio publicado por los Anales de Medicina Interna en febrero de este año indica que 7,5 millones de adultos adquirió un arma por primera vez durante la pandemia, lo que expuso a 11 millones más de personas a armas de fuego en sus hogares. Además, según Statista, los cinco estados con mayor cantidad de armas registradas en manos de civiles son: Texas, Florida, Virginia, California y Pennsylvania.
Si bien son los tiroteos y asesinatos con armas de fuego los que más llaman la atención, según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, CDC por sus siglas en inglés, los suicidios son mayores que los homicidios. Las estadísticas más actualizadas indican que en 2020 hubo 24.242 suicidios y 19.384 homicidios.
Teniendo en cuenta este contexto, muchas opiniones de parte de la población han sido escuchadas, el 87% de la población está de acuerdo en prohibir la venta de armas a personas con enfermedades mentales, el 81% se inclina por hacer más exhaustiva la comprobación de antecedentes penales y más del 60% apoya prohibir las armas de asalto y cargadores de alta capacidad.