El piloto belga explicó que el tiempo les jugó una mala pasada y no llegaron a terminar todos los trabajos que demandó el nuevo auto híbrido.

No fue un buen debut para Hyundai en la primera fecha del campeonato de WRC en Montecarlo el último fin de semana. Ni siquiera se podría considerar un debut normal, directamente habría que decir que fue malo.

De los tres autos del equipo i20 N Rally1, solo Thierry Neuville pudo completar todas las etapas, pero así y todo llegó a más de siete minutos del líder, Loeb. Ott Tänak debió abandonar en el cierre del sábado por una segunda pinchadura de neumático sin repuesto, mientras que Oliver Solberg debió hacerlo el viernes debido a malestares físicos ocasionados por los gases del auto que entraban al habitáculo.

Esto lógicamente no dejó el mejor sabor de boca para los hombres de Hyundai, algo que no ocultó uno de los candidatos al título: "Al final de este rally, nos quedamos con sentimientos de decepción y frustración. Tuvimos un fin de semana complicado. Lo di absolutamente todo y me decepcionó el tiempo".

"Ha habido una gran cantidad de trabajo entre bastidores para preparar este evento, por mi parte y por la de Martijn (Wydaeghe, su copiloto), así como por el equipo, por lo que salir sin ninguna recompensa es difícil de aceptar", se lamentó el belga.

"La voluntad definitivamente está ahí y eso es importante. Hay diferentes áreas en las que vamos a trabajar, pero la más importante es la fiabilidad. Necesitamos ser mucho más fuertes para los próximos eventos", remarcó el corredor de 33 años. Y aseguró para finalizar: "Estamos intentando mantener a todos motivados y seguiremos empujando. No nos rendiremos".

La próxima competencia para el Rally Mundial será dentro de cuatro semanas, cuando visiten Suecia del 24 al 27 de febrero. Ahí, el equipo Hyundai tendrá la posibilidad de revertir la imagen de la primera fecha, aprovechando también que tanto Ford como Toyota no podrán contar con los Sébastien, Loeb y Ogier respectivamente, quienes marcaron una considerable diferencia respecto al resto desde el día uno en el Shakedown.