Nahir Galarza, la joven imputada y detenida luego de haber confesado que asesinó de dos balazos a su ex novio, Fernando Pastorizzo, en Gualeguaychú, protagonizó un supuesto secuestro en el pasado que tomó relevancia nuevamente.

Hace tres años, la adolescente estuvo todo un día sin conocerse su paradero y cuando apareció dijo que la drogaron y la subieron a un auto. Ese día causó una gran preocupación entre su familia porque durante 24 horas no había aparecido. En un clima de incertidumbre y desesperación, sus padres dieron aviso a la Policía. Sin embargo, fue hallada sana y salva.

Cuando la interrogaron sobre qué había ocurrido, dijo que cuando salía de la escuela fue abordada y obligada a subir a un auto, en donde la drogaron y perdió el conocimiento.Como consecuencia de ello, no recordó nada hasta que por la noche despertó tirada en un terreno baldío por la zona norte de Gualeguaychú, según consignó el diario El Día.

Galarza tenía pasto en el pelo y estaba un poco desalineada, pero nada que indicara que había sido víctima de algún delito sexual. El médico policial no constató lesiones ni marcas de ningún tipo sobre la piel y el fiscal que realizó la investigación no pudo acreditar la veracidad de lo denunciado: el caso fue archivado.

Nunca se pudo comprobar nada de lo que la joven contó y todo quedó sujeto a que se trató de una mentira para cubrir una travesura, sin medir las consecuencias de lo que generó.

Situación judicial

La joven está alojada en la Comisaría del Menor y la Mujer y permanecerá en ese lugar hasta el inicio del juicio. En febrero, luego de que finalice la feria judicial, será sometida a las pericias psicológicas psiquiátricas que serán claves para detallar su personalidad y si está en condiciones para enfrentar un juicio oral.