La secretaria de Marcelo D’Alessio confirmó que el fiscal Juan Ignacio Bidone recibía dinero a cambio de información para extorsionar a las víctimas de la red de espionaje ilegal. De esta manera Julieta Ciarmello complicó la situación del fiscal de Mercedes, hoy suspendido en sus funciones y procesado en dos causas por el delito de asociación ilícita y abuso de autoridad.
Ante el juez Alejo Ramos Padilla la mujer habló el lunes durante varias horas en calidad de testigo. Si bien aún no trascendió su declaración, Página/12 pudo confirmar que Ciarmello dijo bajo juramento que Bidone recibía plata de la organización delictiva.
La testigo no pudo precisar si los pagos eran por cada informe que entregaba Bidone o la remuneración era más bien aleatoria o mensual. Lo que sí aseguró es que el fiscal efectivamente recibía dinero, como había afirmado en su indagatoria el ex espía detenido y procesado Rolando Barreiro. 

Según había reconocido en el expediente el propio Bidone, le entregó al falso abogado en numerosas oportunidades carpetas con entrecruzamientos de llamadas y movimientos migratorios de las personas a las que D’Alessio quería extorsionar. Con esa información, D’Alessio amenazaba a sus víctimas mostrándoles que las estaban espiando y que conocían todos sus movimientos. 

En su momento Bidone declaró que actuó siempre de buena fe y que fue engañado por D’Alessio, quien le decía que era un agente de la AFI y que trabajaba de manera legal. El funcionario judicial adujo que siempre creyó que D’Alessio estaba colaborando con la investigación del triple crimen de General Rodríguez -causa que estuvo a cargo de Bidone por más de ocho años- y que bajo ese expediente es que realizó legalmente los pedidos a Migraciones y a las empresas de telefonía. Sin embargo, varios de esos informes no estaban en su oficina incorporados formalmente al expediente, sino que fueron encontrados en un armario de la casa del fiscal durante los allanamientos. Y -según el auto de procesamiento dictado por Ramos Padilla- se reunió prueba suficiente “de su aporte material y puntual en la comisión de diversos planes delictivos que se habrían planificado y llevado adelante en el marco de esa asociación ilícita”.

En concreto, la plata que afirmó Ciarmello que cobró Bidone fue a cambio de la información de los registros telefónicos y las entradas y salidas del país de numerosas víctimas. Según la investigación, se determinó que hay carpetas del diputado Alfredo Olmedo; del ex gobernador de Corrientes Ricardo Colombi; de los dirigentes radicales Eduardo Tassano, Sergio Flinta y Eduardo Alejandro Vischi; de los empresarios Mario Víctor Cifuentes, Pedro Etchebest y de la abogada Giselle Robles. Bidone está procesado en perjuicio de todos ellos por Ramos Padilla y por el juez federal Luis Rodríguez, quien investiga las maniobras de la organización para perjudicar al aduanero Gabriel Traficante en la causa conocida como la “mafia de los contenedores”.
la secretaria de D´Alessio habría dicho que no conoce personalmente a Bidone y acreditó - al igual que otros testigos en la causa- que su jefe atendía a la gente en una oficina con un cartel que decía “Estudio Jurídico”, a pesar de no tener matrícula de abogado.