Un hecho aberrante cobró protagonismo en la provincia de Mendoza durante el domingo, cuando un hombre fue asesinado a puñaladas y una mujer resultó gravemente herida en una casa del departamento mendocino de Luján de Cuyo, por el hecho detuvieron a la actual pareja de la segunda de las víctimas. El acusado, identificado por la policía como José Antonio Segundo, fue capturado en cercanías de la escena del crimen cuando intentaba huir con su hija de tres años.

Según la información policial, el hecho ocurrió cerca de las 8 de este domingo en una casa ubicada en el barrio El Encuentro, en el distrito Perdriel de Luján de Cuyo, a unos 15 kilómetros de la capital mendocina, donde los vecinos llamaron al 911 para denunciar una discusión y agresión.

De acuerdo a los testimonios de vecinos, al llegar a su hogar el hombre se encontró con Heredia y Rodríguez, quienes aparentemente se encontrarían en medio de una situación de intimidad.

De manera inmediata se desató una discusión muy violenta dentro de la casa. Fue tal la tensión que algunos vecinos llegaron a escuchar las recriminaciones y amenazas de Segundo contra los dos amantes.

En circunstancias que aún se desconocen, la tensión, que comenzó con una simple discusión, finalizó con una agresión física marcada por la violencia de género y un asesinato: Segundo tomó un cuchillo de la casa y comenzó a atacar a Heredia y a Rodríguez.

Personal policial y médico constataron al llegar al lugar que en la vivienda había un hombre muerto, con puñaladas en el abdomen y cuello, y una mujer de 26 años con heridas de arma blanca en el cuello, siendo trasladada al Hospital Central, donde permance internada en grave estado.

Los testigos señalaron a los efectivos que la actual pareja de la mujer atacada era el presunto agresor y relataron que había escapado con la ropa manchada con sangre y un cuchillo hacia un descampado, junto a la pequeña hija de ambos. Poco después personal policial logró detener al sospechoso sobre calle Cobos, al sur de calle Thames, al tiempo que la niña fue rescatada en buen estado de salud, según informaron.

Al sospechoso lo redujeron y le secuestraron un teléfono celular que había en el piso. También detectaron que tenía rastros de sangre en sus prendas de vestir, tal como habían aportado los testigos.

Los testigos continuaron contando detalles a los policías en la escena y coincidieron en que se escucharon gritos y peleas en la casa que compartían Heredia con Segundo. El detenido fue trasladado a la comisaría 11ª y quedó a disposición de la fiscal de homicidios Claudia Ríos.