La gran indignación generada por las fotos que tres empleados de la funeraria se sacaron con el cadáver de Diego Maradona llegó a un nivel tal que, ahora, varias barras están en la búsqueda de estas personas para tomar "venganza" por esta violación a la intimidad. 

El objetivo de los barrabravas serían Diego Molina, el apodado por muchos como el "gordo funebrero", Claudio Fernández y su hijo Ismael Fernández, quien aparece en otra de las fotos con el pulgar hacia arriba al lado del ataúd de Diego. Según rumores, además de esta dos fotos que se hicieron virales, estas personas se habrían encargado de sacar varias más en las que sólo se lo ve a Maradona. 

Ante este escenario, comenzaron a circular por las redes sociales una serie de audios en los que los integrantes de La 12 se estarían organizando para dar con los tres empleados y no, precisamente, para tener una charla amistosa.  Trascendió también que Molina ya habría sido encontrado por los barras y golpeado de manera brutal, al punto de dejarlo en terapia intensiva. Esto, además, acompañado por una supuesta foto del empleado en la cama del hospital. Pero todo esto fue desmentido.

Aunque no hay certezas de que los audios sea auténticos, sí se sabe que no sólo la barra de Boca, sino también las de otros clubes, están buscando a estos empleados. Por eso, desde la Policía están atentos y pretender dar con el paradero de los involucrados, no sólo para que sea puestos a disposición de la justicia sino, también, para protegerlos de la furia de los barras.