Para evitar la aglomeración de personas en lugares cerrados, y siguiendo las recomendaciones del Gobierno nacional y del porteño por coronavirus, el Consejo Episcopal de la Arquidiósesis de Buenos Aires solicitó a los mayores a 65 años se abstengan de concurrir a misa.

“Rogamos a los fieles que sepan acatar las indicaciones, priorizando el bien común por el cuidado de todos, en especial de los grupos de riesgo”, dice el comunicado.

“Les recomendamos prever, con la ayuda de voluntarios, que no se superen estos números de participantes, ya que el incumplimiento en la aplicación de estas indicaciones constituye un delito”, advierte el escrito.

Teniendo en cuenta esos límites en la cantidad de asistentes permitidos en una celebración, la Iglesia entiende que “no será posible que todos los fieles participen de la misa dominical”. Por tal motivo, los libera del cumplimiento del precepto hasta nuevo aviso.

A aquellos fieles que deseen seguir escuchando la palabra de Dios se los invita a mirar Orbe21, una canal de TV religioso que transmite la Eucaristía dominical en cualquier momento del día por sus redes sociales.

Con la cercanía de la Semana Santa, la Iglesia llamó a los párrocos a disponer lo necesario para el cumplimiento de la normativa vigente. “Se recomienda distribuir la comunión solamente en la mano, debidamente higienizada. La responsabilidad común en evitar la propagación del virus y la misma caridad fraterna nos reclaman esta fuerte recomendación dado que la primera vía de contagio es la oral”, enfatiza el escrito.

Y advierte que la distribución de la comunión en la boca, aún con recaudos, no elimina la posibilidad de contagio y que el virus se propague de fiel a fiel, incluido al propio ministro.

En cuanto a la práctica ritual del saludo de la Paz, al ser un rito optativo, se recomienda omitirlo.

Además, recuerda que el decreto del Gobierno de la Ciudad establece un plazo para el acatamiento de las medidas que incluye el Viernes Santo y dispone la cancelación de todos los eventos masivos no esenciales, “razón por la cual quedan suspendidos los Vía Crucis en las calles y, por lo tanto, también el gesto misionero de Ramos en su modo habitual”, informa. Por último, llama a los sacerdotes a rezar por los infectados a causa del coronavirus.