La Justicia de Córdoba ordenó cubrir el tratamiento de Sabrina Monteverde

La joven tiene 22 años y sufre un trastorno por el que debe recibir una costosa terapia.
viernes, 3 de julio de 2020 12:58
viernes, 3 de julio de 2020 12:58

La joven cordobesa, Sabrina Monteverde tiene 22 años, y fue diagnosticada con fibrosis quística al poco tiempo que nació. El miércoles por la noche,  publicó en su cuenta de Instagram un video que se hizo viral,  pidiendo ayuda por su delicada situación.

“Mi cuerpo ya no entiende de tiempos, estoy peleando por mi vida” fue el pedido desesperado que finalmente se oyó y tuvo un final feliz, ya que la Justicia de Córdoba falló a su favor y su obra social deberá cubrir el tratamiento.

Así fue como la Cámara Contencioso Administrativa de 2ª Nominación de Córdoba resolvió a favor del amparo que presentó la familia de la joven que pedía que su obra social cubra el costoso tratamiento de 331 mil dólares anuales.

El Ministerio de Salud de Córdoba y la obra social de Sabrina tienen 48 horas para apelar la resolución.

La vocal de Cámara, María Inés Ortiz de Gallardo, citó “a comparecer en el plazo de tres días y a contestar el informe” a “la Provincia de Córdoba, a través de las autoridades del Ministerio de Salud, en calidad de garante del derecho a la salud, para que coparticipe en el pago del 100% de la cobertura que exija el tratamiento de Sabrina”, según informaron a Cadena 3.

En su resolución, la camarista también exhortó a las autoridades sanitarias nacionales y provinciales de los ministerios de Salud para que promuevan activamente la continuidad del tratamiento legislativo del Proyecto de Ley de Protección para Pacientes con Fibrosis Quística, que actualmente cuenta con media sanción de la Cámara de Diputados de la Nación, y está a consideración parlamentaria del Senado.

72%
Satisfacción
18%
Esperanza
9%
Bronca
0%
Tristeza
0%
Incertidumbre
0%
Indiferencia

Comentarios

3/7/2020 | 14:47
#149006
En este país para conseguir que la ley se cumpla y se respeten derechos de los ciudadanos, primero hay que suplicar de rodillas y arrastrarse, después encadenarse y hacer ayuno, o salir en los medios y redes sociales haciendo público algo muy privado, a veces con vergüenza y dolor, para que recién LA JUSTICIA actúe. El otro camino es callarse, asumir que todo es una cloaca y que quienes elegimos para administrar el estado lo hacen sólo para unos pocos, y morir dignamente.