Un contingente de más de 50 jóvenes cordobeses fue demorado durante la madrugada y hasta el mediodía de ayer, luego de que en el colectivo en el que se conducía se encontraran varios teléfonos celulares robados. El grupo había venido a un recital de cuarteto en un local nocturno de San Antonio -Fray Mamerto Esquiú-, y debió esperar hasta el mediodía de ayer para poder emprender el regreso.
El inconveniente se suscitó cuando una joven que había estado en el mismo recital, fue vícitma del arrebato de su teléfono celular, y observó que el delincuente subía a un colectivo que estaba en las inmediaciones. Rápidamente dio aviso a la policía y se ordenó que el vehículo quedara demorado con todos sus pasajeros hasta aclarar la situación.
Los efectivos policiales realizaron una requisa en el interior de la unidad de transporte, que provenía de la provincia de Córdoba. En el interior había chicos de entre 17 y 18 años en su mayoría. Dentro del colectivo, más precisamente en el baño de la unidad, se encontró el teléfono celular que había sido arrebatado. Y dos más debajo de los asientos, por lo que se dio participación a la Unidad Judicial Nº 11 y al Juzgado de Menores en turno.
Además de la requisa en busca de los aparatos robados, también se dio participación a la Dirección de Drogas Peligrosas para verificar si había sustancias ilegales, aunque finalmente no encontraron nada irregular en ese sentido.

Maltrato

En diálogo con El Esquiú.com, algunos menores manifestaron que fueron “maltratados” por la policía. “Nos trataron de chorros y nos pegaban ‘coscachos’ en la cabeza”, reclamaron los menores, quienes se sintieron “discriminados” por el operativo policial.
El colectivo y todos sus pasajeros quedaron varados hasta las 12.30 de ayer. Recién entonces la Justicia liberó la demora y pudieron emprender el regreso, aunque el caso sigue bajo investigación de la Justicia de Menores local.

Apedrearon a los policías

Ocho jóvenes fueron detenidos ayer a la madrugada por efectivos de la Comisaría Departamental de Fray Mamerto Esquiú, luego de que apedrearan varios domicilios, y atacaran a los uniformados que intervinieron en el operativo. Siete de los revoltososo tienen entre 18 y 21 años, y también se demoró a un adolescente de 15 años.
El hecho se produjo alrededor de las 3.15 de ayer en inmediaciones de los barrios 48 y 56 viviendas, donde vecinos informaron que sus casas eran atacadas a pedradas por una patota.
Al arribar un móvil policial al lugar, los policías se dieron con un grupo de jóvenes que comenzaron a atacar a pedradas al vehículo policial, que terminó con daños materiales.
Ante esta situación, y tras la colaboración de efectivos de otras jurisdicciones de la zona, se aprehendió a los agresores, que fueron identifidcados por la Policía como Pablo Luna (18); Fabio Díaz (21); Cristina Velárdez (20); Julio Varela (21); Luis Gargano Mercado (18) y Nicolás Barrionuevo (18). Junto a ellos se encontraba también un chico de 15 años que fue demorado y puesto a disposición de la Justicia de Menores.
En el hecho intervino la Unidad Judicial Nº 11.