El Tribunal Oral Federal de La Rioja, comenzó ayer un juicio público por el transporte de estupefacientes, que tiene a un catamarqueño como uno de sus principales imputados.
Se trata de Claudio Antonio Algañaraz, (52) quien fue sindicado por testigos claves como la persona que entregó un paquete con un kilo de cocaína para que sea trasladada desde Catamarca con destino a La Rioja.
Algañaraz es un comerciante que fue detenido en la provincia por los investigadores de La Rioja que trabajan en la causa. En la pesquisa, también realizaron un procedimiento en la vivienda del imputado, en el que secuestraron objetos que fueron incorporados en el expediente como pruebas para sostener la acusación.

El hecho

El episodio se resgistró en marzo de este año, cuando personal de Gendarmería Nacional detuvo a un vehículo en el empalme de las rutas 9 y 38. En el auto se dirigían Sebastián Alonso, de 34 años y Adolfo Soul de 44. Este último llevaba una mochila que en su interior contenía la sustancia, y la cual habría sido entregada por el catamarqueño Algañaraz.
Ayer Soul y Alonso declararon ante el Tribunal, mientras que Algañaraz se abstuvo de expresarse ante el Tribunal.
Soul manifestó que Algañaraz le entregó un envoltorio en una finca que tiene el acusado en Catamarca, para que sea trasladado hasta La Rioja. Allí debería esperar el llamado de una persona de nombre “Maximiliano”, a quien debía hacer la entrega del paquete.
El acusado dijo que sólo Algañaraz estaría involucrado, deslindando de responsabilidades a Alonso, quien sólo lo habría trasladado desde Chumbicha hasta La Rioja, desconociendo la existencia de la sustancia.
Soul reconoció que es adicto a las drogas desde los 18 años, y por haber colaborado en la detención de Algañaraz, le cabería la figura del “imputado arrepentido” según lo expresa el artículo Nº 23 de la Ley de estupefacientes.
Hoy está previsto que declaren los últimos testigos en el debate. Luego, se expondrían los alegatos y al finalizar la jornada, podría conocerse la sentencia.