Lo resolvió el fiscal de Belén, Jorge Alberto Flores

Envían a juicio a dos acusados de violación

Uno de los hechos ocurrió en Laguna Blanca, en enero. El restante en las afueras de Belén. Un pastor evangelista habría manoseado a una menor.
viernes, 17 de diciembre de 2010 00:00
viernes, 17 de diciembre de 2010 00:00

Dos investigaciones por supuestas violaciones a menores ocurridas en el departamento Belén fueron enviadas a juicio oral por el fiscal de Instrucción Jorge Alberto Flores. Los imputados son Nazareno Gutiérrez, quien habría violado a una adolescente el pasado 1º de enero, y Silvio Quiroga, quien también abusó y dejó embarazada a una menor de 14 años.
Gutiérrez, de alrededor de 28 años, está imputado por el delito de abuso sexual con acceso carnal, y se encuentra con prisión preventiva firme en el Servicio Penitenciario. Según la acusación en su contra, el 1º de enero sometió a una joven adolescente a la que conocía de vista. Conforme a la versión de la menor, fue sorprendida por el acusado cuando iba a comprar combustible con un bidón.
Gutiérrez le habría quitado el recipiente y de esta forma, logró que lo siguiera hacia un lugar alejado del caserío. Una vez allí, habría sometido a la víctima por la fuerza, accediéndola carnalmente por vía vaginal. El imputado, que cuenta con la asistencia del abogado Florencio Fernández, negó la acusación y ahora el letrado se opuso a la elevación a juicio. Por lo que el expediente será analizado por el
juez de Garantías Jorge Moreno.
 

ADN
 

Por otra parte, el fiscal Flores también elevó a juicio oral la investigación en contra de un hombre identificado como Silvio Quiroga, quien está acusado de haber violado a una menor de 14 años cuando pastoreaba ovejas, en las afueras de Belén. Como consecuencia de la violación, la víctima quedó embarazada y mediante un análisis comparado de ADN se determinó que era el padre del bebé que la menor dio a luz.
El hecho habría ocurrido en agosto del año pasado. Según la niña, el imputado la sorprendió en el campo cuando cuidaba el rebaño de su familia y primero se acercó a hablar y le propuso tener relaciones sexuales, a lo que la niña se negó. Ante ello, la habría llevado por la fuerza y la ultrajó. La menor sufre una dolencia congénita en sus caderas, lo que le impidió defenderse de su agresor.
El caso fue denunciado meses después, cuando su familia advirtió que la chica estaba embarazada.
Además de los análisis de ADN, en la causa obran exámenes psicológicos y médicos que acreditan la versión.

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