Durante la madrugada de ayer dos comercios fueron víctimas de impunes asaltantes armados, que hasta anoche no habían sido detenidos por la policía. En uno de los hechos, los delincuentes se llevaron bebidas alcohólicas de una despensa del barrio Eva Perón, mientras que en un restorán de Villa Parque Chacabuco sólo se llevaron algunas carteras y celulares.
El primer hecho se registró a la 1.40 de la mañana en la zona norte de la ciudad. Cuatro delincuentes que se movilizaban en motocicletas ingresaron al comercio de una familia de apellido Sánchez, en la manzana 27 del barrio Eva Perón, y tras amenazar a la dueña con cuchillos, cargaron botellas de fernet, vino y otras bebidas alcohólicas y se dieron a la fuga raudamente.
La mujer dio aviso a la policía y un móvil de la Comisaría Séptima llegó al lugar, pero pese al rastrillaje que se hizo en el sector, no se pudo dar con los sospechosos.

En un restorán

El otro asalto a mano armada ocurrió más entrada la madrugada, alrededor de las cuatro, en el local de comidas “Koko Mongo”, ubicado en Villa Parque Chacabuco, sobre la avenida Presidente Castillo, cuando dos delincuentes llegaron al mando de una motocicleta y encañonaron a una de las empleadas del lugar, Liz Cativa, de 24 años, cuando se disponía a cerrar el local.
Los delincuentes, a punta de pistola y con un arma blanca, en principio quisieron abrir la caja registradora y obtener la recaudación, pero al no lograrlo, ni tampoco poder llevársela consigo, decidieron apoderarse de las carteras de dos empleadas. En una de ellas, propiedad de Valeria Coronel, había setenta pesos. No contentos con el robo de las dos carteras también se llevaron un celular.
Los asaltantes con el magro botín subieron a la motocicleta y se dieron rápidamente a la fuga. Las víctimas llamaron a la policía, pero los delincuentes no pudieron ser localizados.
Ambos hechos fueron informados al fiscal en turno, Alejandro Dalla Lasta, quien ordenó una serie de medidas y pericias para tratar de dar con los delincuentes.