El fiscal a cargo de la investigación del caso Píparo, Marcelo Romero, realizó ayer la recreación de la secuencia del momento en que Carolina fue “marcada” y posteriormente baleada, lo que le costó la muerte de su bebé y casi un mes de internación. La rencostrucción del hecho se llevó a cabo en inmediaciones del Banco Santander Río de la ciudad de La Plata. El acto procesal fue monitoreado por Romero y la fiscal del juicio, Maribel Furnus, quienes pudieron obtener una visión directa de lo que fue el trágico hecho. Aunque finalmente no aportó mucho a la instrucción.
Romero señaló que la recreación fue realizada en base a los videos que se obtuvieron del interior de la sucursal bancaria el día de la salidera, cuando Carolina retiraba el dinero. Fue llevada a cabo por actores policiales con el fin de poder ilustrar al tribunal en el eventual juicio oral, que por su parte Romero espera que se realice pronto.
La diligencia judicial comenzó cerca de las 11. 30 de la mañana, y estuvieron presentes los abogados de cada una de las partes. En representación de la familia Píparo estuvieron los abogados Fernando Burlando y Fabián Améndola, y por parte de la defensa de los imputados, Rubén Carrazone.
Alrededor de las 11:22, un policía que simulaba ser Carlos Jordán Juárez, quien al parecer sería el “líder” de la banda, ingresó a la sucursal del banco para salir un poco después. Minutos más tarde dos mujeres que caracterizaron a Carolina Píparo y a su madre estacionaron el Vokswagen Polo en el estacionamiento del banco y descendieron para ingresar a la entidad.
Luego entró al lugar otro actor que simuló ser Silva y que vestía un buzo rojo, que fue el que captó la cámara de seguridad, y sería el “marcador” de Carolina.
Posteriormente se recreó la escena donde Silva se retiró del banco, cruzó la calle y aguardó a que saliera la víctima, que iba en compañía de su madre. Ambas subieron a su automóvil y se dirigieron a su domicilio.
El Fiscal Romero explicó que gracias al procedimiento de reconstrucción del hecho, pudieron constatar que el lugar es chico, por lo que se podía oir y ver todo. Esto le permitió concluir que fue más que seguro que Silva pudo advertir que Carolina estaba embarazada, y que lo que declaró en su indagatoria sería mentira, ya que expresó no haberse dado cuenta del estado de gravidez de la víctima.