En medio de un control vehicular, Marcos Molas, propietario del comercio Zenda Motos, fue víctima de un atropello policial cuando un uniformado lo habría increpado agresivamente por no contar con la chapa patente de su motocicleta. Según explicó Molas, la chapa se encuentra en trámite.
El comerciante narró que el día del hecho se dirigía a su local cuando fue interceptado por un control vehicular. Uno de los uniformados le pidió los papeles reglamentarios, que de acuerdo con lo declarado por Molas, se encuentran en regla.
El efectivo, no contento con la documentación presentada, cuestionó al conductor por no contar con la patente de la motocicleta. Molas respondió diciendo que se encuentra en trámite, ya que al ser propietario de un local de motocicletas por ley debe realizar un control de registro expedido por el Registro Nacional del Automotor.

Violento

Conservando su postura, el uniformado agredió verbal y físicamente a Molas arrinconándolo contra el móvil policial y exigiéndole que “se calle la boca”.
Ante esta situación se acercó otro policía, quien revisó la documentación de la víctima, y al ver que estaba todo en orden solicitó que se deje circular al conductor.