Un espectacular vuelco se registró ayer al mediodía en la ciudad de Fiambalá, cuando dos jóvenes, uno de ellos menor, circulaban a alta velocidad y aparentemente alcoholizados. Lo protagonizó un automóvil marca Chevrolet Corsa que se conducía por una calle interna del B° San Cayetano, cuyo conductor perdió el control, chocó con una vivienda y quedó tumbado sobre el techo.
Por fortuna, los ocupantes del vehículo, dos jóvenes de 17 y 19 años, lograron salir prácticamente ilesos, sólo con algunos golpes que no presentaban gravedad.
Uno de los jóvenes salió por sus propios medios del habitáculo, en tanto que el otro quedó atrapado entre el techo y el volante, pero fue auxiliado por los vecinos.
Los menores fueron trasladados hasta el Hospital Dr. Luis Agote donde fueron atendidos por el médico de guardia, Barba Criollo, quien los dejó internados en observación. “Ambos jóvenes registran politraumatismo, no son de gravedad, lamentablemente estaban bajo los efectos del alcohol, pero no será necesario derivarlos a otros centro de salud”, dijo el facultativo a medios radiales.
El propietario del vehículo, Ariel Bustamante, está radicado en el sur del país, pero es oriundo de Fiambalá, y hace unos pocos días viajó a esa ciudad a visitar a su familia en el automóvil prácticamente nuevo, ya que habría sido retirado de la concesionaria en noviembre del año pasado. Aparentemente le habría prestado el vehículo a su hermano para “dar una vuelta”.
Al parecer el accidente se originó debido a que conducían a excesiva velocidad, y al ser una calle de tierra perdieron el control e impactaron contra el domicilio de la familia Oviedo.
Una de las personas que se encontraba en el domicilio, comentó que mayores y niños se encontraban dentro de la casa, cuando de repente escucharon un fuerte estruendo. Y al salir se encontraron con el automóvil volcado en el patio de la casa.
De no ser por un montículo de piedra que se encontraba en el lugar y que desvió la dirección del automóvil, habrían chocado de frente con la vivienda, lo que hubiese cambiado el destino de sus ocupantes como de las personas que se encontraban dentro de la casa.

Reclamo

El accidente generó una ola de reclamos por parte de los vecinos del lugar, quienes manifestaron sus quejas debido a las altas velocidades a las que circulan por esas calles en las que no existe control alguno, mucho menos los fines de semanas a altas horas. A su vez queda evidenciada la escasez de personal en la Dirección de Inspección General y la incapacidad del municipio para aplicar las leyes de tránsito en controles y actas de infracciones consumadas.