Un joven de 18 años, que intentaba entrar a robar a una casa que estaba vacía porque sus dueños se habían ido de vacaciones, quiso usar la chimenea para ingresar, al estilo de Papá Noel, pero se quedó atrapado y finalmente tuvo que ser rescatado por los bomberos y terminó detenido.

El insólito episodio, que trascendió hoy, ocurrió ayer por la madrugada en una vivienda de la localidad de Vicuña Mackenna, en el sur cordobés, a unos 250 kilómetros de la capital provincial.

Según señalaron medios de prensa locales, todo comenzó a quedar al descubierto por el llamado telefónico de los vecinos, quienes a las 4:40 de la madrugada escucharon gritos de auxilio pero no sabían exactamente de dónde provenían.

Ante el llamado de los vecinos, la Policía concurrió a la cuadra de la calle Pascual Besiglia al 800, y si bien dieron varias vueltas a la manzana en el vehículo, no escucharon nada, según lo señalado por el diario El Puntal, de la ciudad de Río Cuarto.

Por eso decidieron descender del vehículo y caminar en medio del silencio de la noche, hasta que escucharon un grito que provenía de alguna de las casas de esa cuadra.

Los policías subieron al techo de una de las viviendas y de allí fueron pasando a otra casa, hasta que oyeron los gritos de una persona que pedía auxilio.

Según lo señalado, para sorpresa de todos, en la chimenea de una propiedad -cuyos habitantes estaban de vacaciones-, en la chimenea había una persona atrapada.

Con la anuencia del juez de Paz se rompió un vidrio, se ingresó con testigos y observaron que efectivamente había un ladrón que había quedado atrapado en la chimenea.

Los policías tuvieron que convocar a los bomberos, quienes debieron voltear la estructura de la chimenea de la residencia para retirar al ladrón que estaba atascado.

Luego de un intenso trabajo se logró rescatarlo, y lo llevaron al hospital para que fuera revisado.

Luego, el joven terminó preso en una de las celdas de la comisaría local, acusado por el delito de "hurto calificado en grado de tentativa".

 

 

Fuente: NA