Una mañana llena de actividad se vivió ayer en Fiscalía, y particularmente en la Unidad de Delitos Especiales, ya que fue indagado Carlos Segura, el único sobreviviente del fatal tiroteo acaecido en El Alto días atrás, y por otro lado también fueron llevados para declarar los cinco imputados por el crimen de Cengel (ver página 7).
En el primero caso, Segura arribó alrededor de las 11 para prestar declaración ante las autoridades de Delitos Especiales. Sus afirmaciones, según la información a la que se pudo acceder, apuntaron a señalar que durante la violenta trifulca él sólo atinó a defenderse a sí mismo y a su hijo, quien perdió la vida como consecuencia de los disparos gatillados por los dos Pinto.
De esta manera, de acuerdo con la declaración conocida y la posible interpretación jurídica, se intentaría dilucidar en qué medida el accionar del hombre podría recaer bajo la figura jurídica de una defensa legítima. Segura, tras ofrecer su declaración, quedó detenido y en esta situación seguiría hasta que se esclarezcan por completo las circunstancias del hecho que conmocionó a la localidad de Colonia de Achalco.

Familiares y amigos

Tras la declaración de Carlos Segura, El Esquiú.com pudo dialogar con los familiares y amigos que lo acompañaron, viajando desde El Alto a Capital. Todos ellos, según se desprende de sus propias palabras, coincidieron en que Segura es “un hombre respetado por la gente del pueblo”.
“Todos saben quién es él y quiénes eran los Pinto; ellos siempre sobresalieron por varios delitos, uno de ellos cumplió una pena efectiva por un homicidio y también mató a otras personas en accidentes viales, pero no estuvo más de una semana detenido por esos hechos; allá nos conocemos todos con todos y cada cual sabe con quién se enfrenta cuando se lo cruza”, dijeron los allegados al único imputado que tiene la causa por el feroz tiroteo. Además, la hija de Segura comentó a grandes rasgos cómo vivió el momento en el que se enteró de la violenta trifulca.
“A mí me contaron que Gabriel (su hermano asesinado durante el tiroteo) había estado fuera de casa, en Morteros, visitando familia, y cuando volvía se cruzó con los Pinto, que son conocidos por cuatreros; ahí mandó a llamar a mi papá para que lo ayudara por las dudas e hizo bien; cuando llegó mi papá ya lo habían atacado y él atinó a defender a su hijo”, aseguró la hija de Segura.
Con respecto a los muchachos Pinto, los allegados a Segura reiteraron cómo se manejaban en la localidad. “Siempre la gente les tenía miedo porque iban armados, siempre con algún arma en la mano; siempre tuvieron la mala costumbre de entrar a campos ajenos sin respetar las normas para cuatrerear animales, ellos eran así”, aseguraron.
Cabe recordar que durante los funerales realizados en El Alto para los diferente miembros de las dos familias, hubo varios disturbios, palabras cruzadas y amenazas.

"Cuatreros"

Los allegados a Carlos Segura explicaron en conversación con El Esquiú.com que los Pinto “nunca respetaron las reglas y siempre fueron conocidos por entrar a propiedades ajenas para robar”.