Después de mucho tiempo sin novedades, avanza la investigación en torno a las irregularidades descubiertas en el hospital neuropsiquiátrico de La Merced (Paclín). En esa oportunidad y tras un allanamiento se descubrió la compra de más de 200 pollos en mal estado, y un sinnúmero de facturas apócrifas. El escándalo saltó en 2010, luego de una denuncia anónima a la que posteriormente se sumó mayor información brindada desde la Oficina Anticorrupción dependiente de la Fiscalía de Estado.
Al respecto se conoció que la Unidad Fiscal de Delitos Especiales y Contra la Administración Pública procedió a la detención de las médicas María Isabel Labiaguerre (exjefa del Área Programática Nº3) y Stella Maris Gómez (exjefa de Servicio de Administración) por más de 80 hechos de fraude a la administración pública, falsificación de documentación e incumplimiento de los deberes de funcionario público. Asimismo, también se detuvo a Roberto Acosta, empleado del Tribunal de Cuentas, por 30 hechos de fraude a la administración pública. Acosta está implicado en la causa puesto que él justificaba ante el Tribunal de Cuentas la documentación apócrifa que salía del neuropsiquiátrico.
De acuerdo con lo que manifestaron desde la Justicia, los tres implicados fueron detenidos en su lugar de trabajo, donde no ofrecieron resistencia. Cabe aclarar que Labiaguerre, Gómez y Acosta no son los únicos sobre los que se pidió la detención. En ese sentido, se conoció que hay más imputaciones y que se libraron otros pedidos de detención.
Por último y según se supo, la investigación, por ahora, corresponde solamente al periodo 2009. En ese año se habrían “perdido” 200.000 pesos.
La ampliación de la denuncia que realizó Fiscalía de Estado acusaba también a Rosa Isabel Gómez (enfermera del Área Programática Nº3), a María Susana Coronel (jefa del Servicio de Economato), a Analía Amado (jefa de Personal del Hospital), a María del Huerto Codigoni (empleada de la Dirección de Administración del Ministerio de Desarrollo Social), por los delitos de fraude en contra de la Administración Pública, incumplimiento de los deberes de funcionario público, falsificación de documentos y posible asociación ilícita.

La historia de la investigación
Según la denuncia de Fiscalía de Estado, la causa nace cuando luego de una denuncia anónima se procede a realizar auditorías en el hospital, donde se descubrió que la encargada del Economato, María Susana Coronel, había recibido 200 pollos en mal estado “a sabiendas de que era imposible que fueran consumidos” de parte de Rosa Gómez, “dejando como constancia sólo un papel en blanco escrito de su puño y letra con el detalle de la mercadería”.
El pago de esta mercadería se realizó con un cheque de 4.900 pesos al proveedor Polirrubro, de Juan Alejandro Mole, que coincidentemente tiene su domicilio comercial en el mismo lugar donde la administradora del hospital, Stella Maris Gómez, tiene su domicilio real. Además Rosa Gómez, quien es enfermera del Área Programática Nº3, es hermana de la administradora del hospital.
Por otra parte la denuncia presentada por Fiscalía de Estado señala irregularidades en un sinnúmero de facturas libradas desde el nosocomio con firmas, formatos, números de cuil y montos asignados.
Asimismo, los cheques librados desde el nosocomio eran cobrados por personas completamente ajenas a los comercios que figuraban en las facturas.