Los insultos se multiplicaban en la sala donde se leyó el fallo, mientras la madre de Marita Verón abandonaba el lugar de manera apresurada y agobiada por al acoso de la prensa y de la gente que no podía creer la resolución judicial.

José D'Antona, abogado de Trimarco, fue el encargado de dar a conocer cuál era su sensación y la de su clienta: "Está absolutamente claro que esto es un acto de corrupción".

"Les voy a pedir (a los medios) un poco más de ayuda de la que ya le han dado a Susana Trimarco. Les pido que nos dejen, porque este es un acto de corrupción que tenemos que analizar en este momento", pidió el asesor letrado.

Antes de retirarse, D'Antona anunció que en instantes darán una conferencia de prensa "en la casa de Susana" y prometió que allí van a dar "todas las explicaciones".

Una multitud acompañó la salida de Trimarco, que se subió a una camioneta; de fondo se escuchaban los gritos de "injusticia" y atronaba: "Los jueces tienen miedo".