Pablo Tello, el único detenido por el secuestro de un cargamento de 90 kilos de marihuana, fue notificado ayer de su procesamiento y prisión preventiva en el marco de la causa.
Así fue dispuesto desde la Justicia Federal, ya que la imputación que recae sobre él, la de transporte de estupefacientes con fines de comercialización, constituye un tipo de delito que no permite la excarcelación.
Anteriormente, cuando fue llamado a prestar declaración indagatoria, Tello había sostenido su inocencia esgrimiendo que en realidad fue llevado mediante engaños por Walter Ariel Alanís hasta la provincia de Corrientes, donde le plantaron la carga sin que él lo supiera, hasta que fue interceptado en El Portezuelo.
Una vez instalada la sospecha, la Justicia Federal salió a buscar a Alanís, quien al igual que Tello es oriundo de El Pajonal, en el departamento Belén. No obstante, su abogado defensor, Luciano Rojas, indicó en declaraciones a los medios que el sujeto no se presentaría, salvo que se lo exima de prisión, ya que no quiere quedar detenido en el Penitenciario tal como ahora deberá permanecer Tello, mientras la investigación en su contra sigue su curso.
De este modo, debido a su voluntad de permanecer prófugo, la Justicia Federal emitió días atrás el pedido de captura internacional en contra de Alanís, por lo cual se estima que de un momento a otro podrían surgir novedades en cuanto al paradero del sospechoso.
Paralelamente, se siguen llevando a cabo todas las medidas probatorias solicitadas por la Fiscalía Federal.

90 kilos

El pasado 16 de noviembre se detuvo al automóvil de Tello en el puesto caminero de El Portezuelo, y al ser requisado se encontró una carga de 90 kilos de marihuana.
Luego de quedar detenido, Tello relató que en realidad él no sabía lo que llevaba y que había sido contratado por Alanís, su vecino, para hacer en principio un viaje hasta La Rioja a buscar un caballo. Allí lo habría tentado a los fines de prolongar el recorrido hasta Corrientes, donde fue alojado en un hotel y sin tener conocimiento, le pusieron la droga en su automóvil y luego regresaron a Catamarca. En la caminera, los otros sujetos se dieron a la fuga.