Otro vuelco de importantes proporciones se registró en uno de los puentes de la localidad de El Portezuelo. Allí, una camioneta Ranger en la que se conducían dos hombres y tres mujeres terminó al costado de la ruta y casi por abajo de un puente tras perder el control del rodado el conductor de apellido Noriega.
Afortunadamente, como consecuencia del anómalo accidente no se registraron más que daños materiales y algunas heridas leves y contusiones; sin embargo, el siniestro mismo dio lugar a otro episodio que llama la atención por su grado de violencia.
Es que según el testimonio de vecinos del lugar, los ocupantes del rodado siniestrado, al lograr salir ilesos, llamaron a una grúa para sacar la camioneta del pozo donde se encontraba y se dirigieron a la casa de un vecino para esperar la llegada del móvil.
Fue en ese momento que dos motociclistas llegaron al lugar en una motocicleta Yamaha Crypton -aparentemente la habían conseguido en una compra callejera por 4.000 pesos la noche anterior- y robaron varios elementos de la camioneta, entre ellos un estéreo, zapatillas -uno de los ocupantes sería vendedor de calzado- y linternas portátiles.
Al enterarse del robo y según el testimonio de los vecinos, el dueño del rodado y los ocupantes lograron interceptar a pie a los ladrones antes de que escaparan y los sometieron a una fuerte paliza en forma de venganza por el robo perpetrado.
Sin embargo, el ensañamiento de los “vengadores” no se limitó a los ladrones sino que se trasladó una vez pasados los golpes de mano hacia la motocicleta que conducían los malechores.
Los muchachos tomaron piedras de gran magnitud y reventaron el rodado a golpes provocando varios daños materiales en el motor y la carrocería de la motocicleta, en una evidente forma de venganza. Los motociclistas lograron alejarse de sus atacantes y escaparon de un nuevo y potencial ensañamiento de los ocupantes de la camioneta Ford Ranger.
En el lugar trabajaron efectivos de la comisaría de Villa Dolores, quienes arribaron luego de los incidentes.
 

Ensañamiento

Vecinos atestiguaron el hecho y aseguraron que los ocupantes del rodado también “se la agarraron” con la motocicleta de los ladrones, usando piedras de gran porte para romper partes del motor y de la carrocería.