Una verdadera tragedia signó la madrugada de ayer luego de que se conociera un fatal episodio acaecido en un domicilio del barrio Capresca, donde un joven de 27 años identificado como Juan de Dios Corzo se quitó la vida tras haber baleado al amante de su exnovia.
El trágico hecho fue reportado minutos después de la medianoche cuando efectivos policiales fueron informados sobre disparios de fuego realizados en el barrio Autonomía. Éstos habían sido gatillados por Corzo con un revólver calibre 22 contra un hombre de 41 años de apellido Espeche, tras una presunta discusión que había mantenido el agresor, la víctima, y la mujer que completa el triángulo amoroso, de apellido Oliva.
Según la información a la que se pudo acceder a través de fuentes judiciales, el hombre le apuntó a su víctima y logró asestarle dos disparos del arma de fuego, uno en la espalda y otro en el brazo. Tras los disparos, Corzo se retiró del lugar para dirigirse directamente a su casa donde se encontraban varios familiares que lo vieron llegar muy consternado por lo sucedido.
De acuerdo a los datos recabados en torno a la situación médica de la víctima, se pudo conocer que fue trasladado al Hospital San Juan Bautista para ser atendido dada la gravedad de las heridas producidas por las balas. No obstante la acuciante situación de salud del hombre, ayer por la tarde fue dado de alta tras haber salido de peligro.
La verdadera tragedia se dio, como ya se explicó, cuando Corzo llegó al domicilio familiar y mantuvo una breve charla con algunas de sus personas más cercanas para luego tomar la fatal decisión de quitarse la vida.
Minutos antes

Según la información a la que pudo acceder El Esquiú.com en torno a los últimos momentos de Corzo de parte de allegados al joven, el muchacho mantuvo una charla con uno de sus hermanos durante la cual le explicó lo que había sucedido: Corzo pensaba que había asesinado al hombre al que le había disparado, ya que se fue del lugar del violento hecho rápidamente y sin fijarse en el estado real en el que se encontraba la víctima.
Con esta situación en mente, el joven le habría dicho a su hermano que había matado a un hombre que estaba saliendo con su exnovia, y que prefería morir antes que ir a la cárcel por el hecho que había perpetrado.
El joven le habría explicado que llegó a la casa de Oliva buscando a su expareja a pesar de que iba a encontrarse con otros amigos; la esperó hasta que llegó en un automóvil Chevrolet Cruze con Espeche conduciendo. Allí se produjo la pelea verbal y el posterior tiroteo. Una vez en su casa, Corzo esperó a quedar solo en su habitación para tomar el mismo revólver con el que había intentado matar a Espeche.
El muchacho se descerrajó un disparo en la cabeza pero no murió en el acto. Los familiares escucharon el disparo, llamaron a una ambulancia y lo trasladaron al Hospital San Juan donde falleció casi doce horas más tarde como inevitable consecuencia del disparo.
Juan Corzo llevaba adelante un importante negocio olivícola en conjunto con su familia en la localidad de Aimogasta, donde lo velarán sus familiares. Ayer por la noche, sus amigos más cercanos se trasladaron a la localidad para acompañar a la familia.

Negocio

Juan de Dios Corzo llevaba adelante un negocio olivícola en conjunto con su familia en Aimogasta, donde será velado. “Era una de las mejores personas que conocí en mi vida, un chango tranquilo y amable; nunca nos vimos venir esto”, dijo un allegado del joven.