Se fue de compras

Denuncian que un represor violó su detención domiciliaria

Jorge Magnacco, imputado por delitos de lesa humanidad durante la última dictadura.
martes, 5 de febrero de 2013 00:00
martes, 5 de febrero de 2013 00:00

La agrupación HIJOS denunció que el represor Jorge Magnacco, que se desempeñaba como capitán de navío y quien fue imputado por haber cometido delitos de lesa humanidad durante la última dictadura militar, fue visto el lunes pasado en un shopping de Barrio Norte, haciendo compras y violando el arresto domiciliario.

Se trata de un médico que recibió tres condenas por haber sido partícipe en los partos clandestinos en la ESMA y sus posteriores apropiaciones, por lo que se lo considera un testigo clave que podría aportar datos fundamentales en las investigaciones referidas a la identidad de las víctimas de terrorismo de Estado.

“Se burla de todos, de sus víctimas, los familiares, la Justicia y el pueblo entero que construyó este proceso histórico de Memoria, Verdad y Justicia”, expresó H.I.J.O.S. Magnacco está siendo juzgado en la megacausa ESMA y durante la audiencia del mismo lunes se había negado a prestar declaración indagatoria.

Desde la agrupación HIJOS exigieron a los “señores jueces” poner fin a estos “privilegios” para los represores sentenciados en los procesos por delitos de lesa humanidad, y en el caso particular de Magnacco, que le sea revocado el beneficio de cumplir la prisión en su casa porque “no podemos seguir cruzándonos con genocidas por las calles”.

La agrupación H.I.J.O.S. destacó que "este genocida se pasea por Buenos Aires como cualquier vecino, pero no lo es, y que usa la salida autorizada exclusivamente para ir al juicio para pasear por Patio Bullrich e ir de compras a la panadería”, señaló la entidad en un comunicado, y respaldó su denuncia con imágenes que pueden verse en YouTube.

“Señores jueces, ya hemos exigido que los genocidas con arresto domiciliario no tengan privilegios, son ustedes quienes deben controlar qué hace Magnacco y cualquier otro cuando no está en su casa".

Además, exigieron que el Tribunal Oral y Federal Nº 5, integrado por los jueces Leopoldo Bruglia, Daniel Obligado y Adriana Paliotti, le revoque en forma inmediata la prisión domiciliaria y ordene su detención en una cárcel común.

“Magnacco tiene las manos manchadas de sangre, la de los bebés nacidos en la ESMA durante el cautiverio de sus madres detenidas-desaparecidas en la última dictadura cívico-militar, y es uno de los que saben dónde están esos hijos que aún no conocen su identidad, pero sigue fiel a los pactos de silencio”, añadieron desde H.I.J.O.S.

“Los juicios a los culpables de delitos de lesa humanidad se complementan con la condena social, y hoy lo demostramos” porque “Magnacco no puede pasar desapercibido", concluyeron.

Magnacco se desempeñó como obstetra del Hospital Naval durante la última dictadura militar e intervino en decenas de casos de niños nacidos en cautiverio. Por ese motivo fue sentenciado en el proceso sobre el plan sistemático.

Además, fue condenado a diez años de prisión por la sustracción, retención y ocultación de Evelyn Karina Bauer Pegoraro, a cuya madre atendió en un parto que tuvo lugar en el centro clandestino que funcionó en la ESMA.

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