La situación de Mauro Orce, acusado de matar a María Eugenia Rojas, podría resolverse la semana entrante y la defensa estima que las pruebas en su contra serían insuficientes para enviarlo hacia el Servicio Penitenciario con prisión preventiva.
El pedido de los fiscales de la Unidad de Delitos Especiales tiene oposición de los defensores del sospechoso, Pedro Vélez y Víctor Pinto. Si bien se desconoce el tiempo que pueda tomarse el juez de Control de Garantías, Héctor Rodolfo Maidana, para expedirse, se presume que no tomaría mucho tiempo.
En cuanto al caudal probatorio que los fiscales Miguel Mauvecín y Marcelo Sago presentaron en contra de Orce, se encuentran los cigarrillos secuestrados tanto en el departamento de la víctima como en la casa del joven, una prenda íntima y las denuncias en su contra por episodios violentos.
En el oficio remitido al juez, quienes instruyen la causa habrían destinado un capítulo aparte a los fines de explicar que existen otras pruebas que aún se encuentran fuera de la provincia, ya que fueron remitidas para su análisis y cuyos resultados aún no regresaron. Por estos informes podría complicarse la situación del imputado o en el caso contrario, ayudarían a su desvinculación.
Desde la defensa se argumentó que tanto los cigarrillos como la prenda íntima no serían de Orce. Por otra parte, algunas de las denuncias en su contra habrían sido desestimadas por la Justicia y otras giran alrededor de un mismo episodio ocurrido con su propia hermana.
La joven María Eugenia Rojas fue apuñalada a fines de enero en su departamento de avenida Virgen del Valle.