Cámara Penal Nº2

Juzgan a docente por abusar de tres alumnas de siete y nueve años

El hecho data de noviembre de 2007 pero se conoció sólo meses más tarde, cuando las víctimas contaron lo sucedido.
martes, 19 de marzo de 2013 00:00
martes, 19 de marzo de 2013 00:00

Hoy comenzará a juzgarse en la Cámara Penal Nº2 a un docente de Valle Viejo identificado por el apellido Villalba, acusado de haber abusado de tres alumnas de siete y nueve años de la institución donde daba clases. El imputado afrontará por este aberrante delito una acusación de abuso sexual sin acceso carnal agravado por la relación de autoridad que ostentaba al momento del hecho.
La investigación fue instruida por la en ese entonces fiscal Patricia Olmi, ahora jueza en la Cámara Penal Nº3, tras haberse conocido en marzo de 2008 los aberrantes hechos que habrían ocurrido, según se estimó durante la instrucción por el testimonio de las víctimas, en noviembre de 2007.
Según trascendió en aquel momento, a pesar del cuidado hermetismo con el que se llevó a cabo la investigación, la fiscal Olmi dio prioridad a los testimonios de las víctimas que declararon sobre hechos independientes entre sí, los informes psicológicos, y las pericias psiquiátricas practicadas por profesionales del Cuerpo Interdisciplinario Forense.
Estas últimas pericias permitieron sacar a la luz los profundos traumas psíquicos que sufrieron las víctimas por los aberrantes episodios vividos.
Con respecto a los testimonios, cabe destacar que cada víctima relató el hecho que le tocó vivir ya que cada abuso sexual fue independiente de los otros casos; no obstante, las palabras de las víctimas sindicaban sin dudas al docente como el autor de todos los hechos quien, según se estima, habría hecho uso de su autoridad para someter a las niñas.
Ante esta situación, el docente tomó la decisión de presentarse espontáneamente ante los investigadores y durante el proceso de declaración indagatoria eligió el silencio tras haber escuchado los hechos que se le endilgaban.
Por otro lado, cabe recordar que durante el proceso la fiscal Olmi pidió la prisión preventiva para el docente, pero el juez de Control de Garantías entendió que no existía peligro procesal en virtud de que el acusado se presentó espontáneamente ante la Justicia sometiéndose a la investigación en todo momento.
Además, cabe recordar que conocido el hecho en el colegio y dado que esperaría el juicio en libertad, el docente siguió trabajando un tiempo más en la institución en cuestión, ya que los directivos entendieron que al no existir todavía una sentencia el hombre tenía derecho a seguir en sus tareas.
 

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