El fiscal de la Unidad de Delitos Criminales, Roberto Mazzucco, será el nuevo encargado de dilucidar el caso hasta el momento no esclarecido de la muerte de la joven Sonia Liliana Garabedián. La decisión de asignar al fiscal a la investigación fue tomada por la Procuradoría General, a cargo de Enrique Lilljedahl.
La nueva asignación se pudo conocer luego de que la Cámara de Apelaciones en lo Penal emitiera un fallo resolviendo denegar el pedido de archivar el caso elevado por el fiscal de la Unidad de Delitos Especiales, Marcelo Sago. En este fallo, los tres magistrados explican que la causa, en virtud de no haber sido agotadas todas las instancias de la investigación, debe permanecer abierta hasta hallar respuestas satisfactorias.
Dado que el mismo fiscal no puede investigar el caso -lo mismo había sucedido con la actuación del ahora fiscal de la Unidad de Delitos Correccionales, Javier Herrera- se asigna un nuevo fiscal de instrucción para dilucidar las circunstancias de la muerte de Liliana Garabedián y los responsables de un presunto asesinato.
Sonia Liliana Garabedián, de 37 años, fue encontrada sin vida en diciembre de 2010 en un descampado ubicado detrás de la Escuela Agrotécnica, unos dos kilómetros y medio al noroeste de la localidad de Miraflores. En un primer momento, se adujo que el cuerpo no presentaba signos de violencia; tiempo después se ordenó investigar si había sido asesinada.