El padre de Mauro Orce, el único imputado por el homicidio de María Eugenia Rojas en enero pasado, manifestó que a raíz de las novedades que surgieron en la investigación por el asesinato de Susana Aguilar el domingo pasado, una vez más se reafirma la inocencia de su hijo.
“Los fiscales están encarnizados con mi hijo”, expresó Orce, refiriéndose a la investigación que llevan adelante Miguel Mauvecín y Marcelo Sago, a cargo de de la Unidad Fiscal de Delitos Especiales.
El hombre opinó que no es casualidad que surgiese que el principal sospechoso, Damián Cano, arrestado en relación a la muerte de Aguilar había tenido en determinado momento una vinculación con el crimen de la psicóloga. Además hizo hincapié en el hecho de que había sido demorado por los fiscales días después de la muerte de María Eugenia Rojas.

Acusación

Orce, en este sentido, acusó a los fiscales “porque no quieren reconocer el error que cometieron con la detención de Mauro” y que precisamente este grave error “es el que le causó la muerte a otra mujer”.
“No queda otra que pedirles que se vayan”, aseguró el padre del imputado, indicando que “si esta mujer ha muerto, es culpa de ellos”.
Con estas duras expresiones, el padre de Orce calificó al trabajo de investigación de los fiscales, a quienes, además, acusa de responder a intereses ocultos a la hora de señalar a su hijo como un sospechoso, cuando hay acabadas pruebas que lo exoneran del asesinato de Rojas.

“Intereses”

A su vez, el hombre dejó deslizar que habría grandes intereses económicos detrás de las falencias que surgen en la investigación que se está realizando, en la que fueron descartados como sospechosos por “portación de apellido”.
“Los fiscales están empecinados y ciegos, no sé qué les pasa”, puntualizó, reiterando su disconformidad por el tiempo excesivo que están demorando los análisis forenses que, sostiene, exonerarían a su hijo.
Por caso, destacó que “es inadmisible que 60 días después del asesinato, no estén los análisis de ADN” de las pruebas que se encontraron en el lugar.
Cabe recordar, como es de público conocimiento, que la psicóloga María Eugenia Rojas fue hallada el 29 de enero pasado en su departamento en llamas y con varias puñaladas en su cuerpo, en un escenario y circunstancias similares a las que fue hallada Susana Aguilar este domingo último.
El único arrestado por el delito es Damián Cano, quien sería novio de una de las hijas de la fallecida y quien también habría tenido una vinculación con María Eugenia; pero los fiscales a cargo de la investigación, no continuaron con esta línea investigativa, concentrándose en la figura de Mauro Orce.

Mensaje

Mario Orce informó que el último mensaje de texto que su hijo le envió a la psicóloga era preguntándole si estaba bien, puesto que, al ser vecino de su edificio, había visto que había una dotación de Bomberos sofocando un incendio el 29 de enero. Sostiene que ésta es una prueba de la inocencia de su hijo, ya que no es la manera de actuar de quien acaba de cometer un crimen de la naturaleza que se le endilga.