Teresa Barros, madre la joven María Rita Valdez, quien fuera asesinada y descuartizada presuntamente por su pareja, Andrés “Negro La Carpa” Quiroga, radicó una denuncia penal contra su pareja, el conocido puntero político Javier “Payo” Rosales, por una estafa que éste habría perpetrado en perjuicio de ella.
Es que Rosales se habría hecho quedar una importante suma de dinero que alcanzaría los 5.000 pesos para luego “desa parecer” de la vida de Teresa Barros, pocos días después del sepelio de la joven María Rita. Según la información trascendida en torno al caso, el dinero que Rosales se hizo quedar ilegítimamente correspondería a la suma total de un subsidio que el Ministerio de Desarrollo Social libró a la madre de María Rita para que pudiese costear los gastos del funeral de la joven.
Según la denuncia de la madre de Valdez, Rosales “se aparejó” con ella a poco de conocerse la muerte de su hija para poder obtener un importante rédito económico haciéndose cargo de toda la papelería correspondiente al funeral. La estafa en sí radica en que Rosales se habría hecho quedar dos cheques signados por 2.400 pesos cada uno.
Además, el puntero político también se habría quedado con varias donaciones de vecinos y allegados destinadas a ayudar a Teresa Barros a paliar el difícil momento que le toca atravesar, ya que María Rita, con su trabajo, contribuía de manera decisiva a la economía de la casa donde vivían en el barrio Villa Eumelia.
Rosales, cabe destacarlo, en los días previos a la noticia de la muerte de María Rita había sido detenido por orden del fiscal correccional Mauricio Navarro Foressi por los cortes organizados y ejecutados por el puntero en varias arterias céntricas y en la ruta nacional Nº38. La investigación de esta denuncia de estafa quedaría a cargo del fiscal criminal en turno, Víctor Figueroa.