Ayer por la tarde Andrés Quiroga, alias “Negro La Carpa” -único imputado por el brutal asesinato de María Rita Valdez-, fue llevado ante las autoridades de la Unidad de Delitos Especiales para ser sometido a un careo con uno de los testigos de la investigación. Durante el proceso, según informaron fuentes consultadas, el testigo de apellido Reynoso -yerno del imputado- se retractó de su primera declaración aduciendo amenazas por parte de los investigadores policiales.
Según la información recabada en torno al proceso, el testigo en su primera declaración aseguró haber visto a Quiroga en inmediaciones de la Plaza de la Estación a las 21.30 del sábado 2 de marzo pasado -horas antes del horario establecido del crimen por los investigadores- dejando a su hijo de dos años bajo custodia de su pareja.
Quiroga, por su parte, había asegurado en su declaración indagatoria que la noche del sábado 2 y toda la madrugada del domingo 3 había estado en un domicilio en compañía de su hijo menor de edad. En virtud de estas contradicciones se realizó un primer careo y durante el mismo el joven Reynoso se retractó de su primera declaración aduciendo amenazas para inducirlo a decir lo que dijo. En este sentido, cabe remarcar que el joven no habría radicado ninguna clase de denuncia ni exposición policial por este hecho.
Por esta razón, según trascendió, los investigadores indagarán a fondo sobre las presuntas amenazas. En este sentido cabe destacar que de no haber indicios de que estas amenazas hayan existido, el joven podría ser imputado bajo una acusación penal de falso testimonio.
Por otro lado, también trascendió que los investigadores ya analizan la posibilidad de realizar más careos con otros testigos para agregar más datos a la causa por el asesinato. No obstante, todavía no han trascendido las identidades de las personas que podrían pasar por este proceso.