En ámbitos de la cámara penal Nº 2, se llevó a cabo en horas de la mañana de ayer el juicio en contra de Franco Daniel Casas de 29 años, quien respondía por el delito de “robo agravado por el uso de arma de fuego, en poblado y en banda”.
El hecho juzgado era un atraco, que junto a otros dos sujetos que no fueron individualizados posteriormente, trató de perpetrar en una peatonal del barrio Libertador II, el 29 de noviembre de 2012, cuando Casas intentó robar la cubierta de un coche, pero fue atrapado por vecinos.
El tribunal dictó una pena de un año y medio de prisión para el joven, en disonancia con lo solicitado por el fiscal subrogante Roberto Mazzuco, quien en la conclusión de sus alegatos finales, solicitó para Casas, una condena de 5 años de prisión efectiva.
La defensa técnica del imputado, trabajada por el abogado Juan Carlos Jiménez Pagés, expresó en sus alegatos, que su defendido contaba con un informe psicológico que daba cuenta de un “componente característico paranoide”.
Esta situación peritada oficialmente sumada al fuerte consumo de alcohol y estupefacientes que el joven había llevado a cabo el día de los hechos, hicieron que el robo que intentara infructuosamente de perpetrar en contra del vehículo propiedad de la familia Nolasco Villone, se hiciera prácticamente en condiciones cercanas a la inimputabilidad, según la interpretación legal de la defensa.
A su vez, el defensor solicitó al juez que se interponga una medida para asegurarse de la desintoxicación del frustrado ladrón; lo que estipula la Ley de Estupefacientes en su artículo 17.