A casi un año del crimen de Fernando Pastorizzo, Nahir Galarza le volvió a abrir las puertas al amor, incluso en el encierro de la cárcel: la condenada a perpetua por haber asesinado a su novio conoció a un narcotraficante y ya gestiona permisos para poder verlo seguido.
Al menos así lo contó el abogado del chico en cuestión, Matías Caudana, que está detenido por formar parte de una banda narco encabezada por su padre, Elbio Gonzalo Caudana.
Según relató el diario UNO de Entre Ríos, Nahir y Matías se habrían conocido en una de las visitas del chico a la cárcel de mujeres de Paraná, en donde se encuentra detenida su abuela por venta de drogas.
“En sus pases del penal de varones (UPI) a la UPVI (de mujeres), conoció a Nahir. Matías tenía el permiso por acercamiento familiar con esta señora, que es la madre de Elbio Caudana”, aseguró Augusto Lafferriere, abogado del joven.
El letrado, además, admitió que ya se hicieron los pedidos correspondientes ante el Tribunal Oral Federal de Paraná como para que puedan verse más seguido.
El tribunal ahora deberá autorizar el acercamiento, el cual también deberá ser notificado al Tribunal de la Justicia de Gualeguaychú. “En el escrito presentado, se pide el acercamiento para profundizar la relación de noviazgo”, agregó Lafferriere.
Nahir Galarza es la mujer más joven condenada a cadena perpetua en toda la historia judicial argentina. Recibió esa pena por acribillar a balazos a su novio, a sangre fría, con un arma de su padre.
La joven intentó negar su repsonsabilidad sin saber que cámaras de seguridad permitieron seguir el incidente.
También intentó negar que mantuviera una relación con su víctima, pero cada una de sus coartadas se cayeron y recibió el castigo mayor.