El fiscal Gustavo Bergesio pidió prisión efectiva para Raúl Alejandro Páez y Mauro Javier Ríos, ambos empleados de seguridad del boliche Bigote Disco, que le habrían propinado una brutal golpiza a Carlos Alberto Gordillo a la salida del local bailable en agosto de 2013.
En la jornada de ayer se llevaron a cabo los alegatos de las partes y el próximo viernes se conocería la sentencia. 
El representante del Ministerio Público Fiscal sostuvo la acusación por la que venían incriminados y solicitó sean condenados a la pena de tres años de prisión en el caso de Páez, mientras que a Ríos, por su condición de policía, la pena de cuatro años de prisión, efectiva en ambos casos.
Además, la querella y acción civil peticionaron la pena máxima para este tipo de delito, que es de seis años de cárcel, y un resarcimiento de 1.300.000 pesos en concepto de daños morales. 
Por su parte, los abogados defensores de los acusados pidieron que los encausados sean absueltos por carecer la causa de material probatorio que los incrimine en el lamentable hecho de violencia. 
Los “patovicas”, como se los denomina comúnmente, fueron imputados por el delito de lesiones graves ya que la víctima habría sufrido desprendimiento del maxilar inferior y pérdidas de piezas dentarias producto del brutal ataque.

Hecho
 
Según informaron fuentes judiciales, sucedió el 17 de agosto de 2013, cuando los agresores se encontraban trabajando en el boliche, que en esa oportunidad funcionaba en calle República esquina Rivadavia. 
Allí, presuntamente sin razones ni mediar palabras, ambos imputados habrían alcanzado a Gordillo a la altura de la intersección de calles Esquiú y Rivadavia, frente al convento de San Francisco, donde comenzaron a agredirlo a golpes de puño. 
Como consecuencia del feroz ataque, el joven víctima habría resultado con lesiones de gravedad que demandaron más de 60 días de curación.
El episodio de violencia habría sucedido cuando los empleados de seguridad intentaron despejar de las inmediaciones a un grupo de personas que habría ocasionado disturbios en el interior del local bailable. 
Finalmente, el tribunal compuesto por los jueces Jorge Álvarez Morales, Rodolfo Bustamante y Luis Raúl Guillamondegui decidieron pasar el debate a un cuarto intermedio para pasado mañana, cuando se conocerá la última palabra de los acusados para luego pasar a deliberar. Posiblemente se conozca el veredicto.